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De Pravia al altar de Aristébano

"Así nos gusta la vida, en la naturaleza y al modo tradicional", aseguran Pablo Díaz y Yoli Martínez, que se casarán el domingo por el rito vaqueiro

Los novios vaqueiros, ayer, en su casa de Prahúa (Pravia). S. ARIAS

Enamorados y nerviosos. Así están los novios vaqueiros que el domingo se darán el "sí, quiero" en Aristébano (Valdés). Pablo Cuervo Díaz y Yoli Martínez Valdés, de Prahúa (Pravia), tienen ya todo listo para disfrutar del día de su boda como a ellos les gusta vivir la vida, "en la naturaleza y al modo tradicional", señala la novia. El domingo al mediodía llegarán a la capilla de la Divina Pastora arropados por el público y setenta invitados, de los cuales treinta irán vestidos como vaqueiros.

"Estamos bastante bien", comenta Martínez, a lo que Díaz responde: "Pues yo sí estoy nervioso". Una conversación entre muchos gestos de cariño y complicidad en una pareja que el día de su boda cumplirá un año y medio de relación. El padrino será el tío del novio, Celestino Díaz "El Zapatero", y la madrina será la hermana de la novia, Raquel Martínez.

Están muy ilusionados pese a la triste noticia de la muerte del pequeño Izan Álvarez el pasado martes, ahogado en una piscina de Soto del Barco, pues tienen mucho aprecio a la familia. Pero se han esforzado por mantener la sonrisa, aunque a veces cuesta, y se han afanado en dejar todos los detalles organizados.

Y eso que han tenido poco tiempo entre el trabajo y lo que los paran por la calle. "El otro día dejé a Yoli tomando un café para ir a por tabaco a quinientos metros y en coche y tardé una hora en llegar", recuerda Díaz. Y es que son muchos los pravianos que les paran para darles la enhorabuena, orgullosos de que vaqueiros pravianos se casen en Aristébano. Y también en Piedras Blancas, de donde es originaria la novia.

Tras la boda se irán unos días a A Coruña para descansar mientras planifican la luna de miel, que será en septiembre. "Queremos parar dos días en París y luego iremos a Manchester y la zona de los lagos", puntualiza Martínez. Y puede que a la vuelta traigan alguna sorpresa, porque Díaz está empeñado en ser padre: "Quiero una vaqueirina", sentencia, aunque la novia prefiere un niño.

Muchos planes e ilusión es lo que desborda la pareja de novios vaqueiros de 2017.

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