"El Fido sigue siendo el motor que mueve a mucha gente a reunirse en la localidad y disfrutar de este ambiente", dijo ayer la concejala de Cultura de Tapia, Dulce Martínez, en la inauguración de la XXI edición del Festival Intercéltico d'Occidente (Fido). La edil indicó que con la cita celta Tapia se sumerge en la "actividad frenética" en lo cultural y festivo que vive la villa cada mes de agosto. El Festival, que cuenta en esta edición con doce agrupaciones participantes, llenará de sonido y color la localidad hasta el próximo domingo.
La responsable de Cultura indicó en el acto inaugural que el Fido no solo "sobrevive sino que crece y entierra sus raíces cada vez más profundas" en la villa, convertido en uno de los eventos más queridos y esperados por los vecinos. Por su parte, el regidor, Enrique Fernández, hizo hincapié en la variedad de las formaciones musicales presentes en esta edición y que permitirán a turistas y vecinos conocer la cultura del Arco Atlántico.
El Alcalde hizo mención en su discurso al papel de la banda de gaitas Occidente (conformada principalmente por la banda de gaitas local Marino Tapiega), pues son los artífices de esta cita, declarada Fiesta de Interés Turístico Regional. "En Tapia nos sentimos orgullosos de ser la capital de esta fiesta", precisó.
El director del Festival, Martín Fernández, hizo hincapié en el trabajo del grupo de personas que hacen posible el evento, al que auguró larga vida por la llegada de sabia joven. No en vano, la banda Marino Tapiega ha incorporado este verano a una decena de músicos formados en la Escuela de Música Tradicional.
El Fido, que incluye un mercado instalado en las plazas de Campogrande y la Constitución, programa hasta el domingo actuaciones musicales, talleres y actividades infantiles. En la inauguración participaron cuatro bandas y no faltó el izado de la bandera celta.
