Ante la inminente llegada de la campaña otoñal, el gobierno del Principado recuerda que "las setas tienen dueño, como los pastos o los árboles", y que corresponde al propietario de ese terreno regular el aprovechamiento de los hongos. La administración regional, por su parte, prepara un decreto que facilitará esa regulación, aunque no hay plazos para su entrada en vigor.
La situación la explicó ayer, en Boal, el director general de Montes e Infraestructuras Agrarias, José Antonio Ferrera: "El principio básico que se debe comprender e interiorizar es que las setas son del propietario de la finca, pertenecen al dueño. No se puede entrar sin su permiso al monte del vecino a coger las setas. Son un aprovechamiento más, como puede ser la madera o los pastos", matizó.
Precisamente en Boal, y con el inicio de la época propicia para las setas, los aficionados locales denuncian un problema: la llegada de "profesionales" de este producto, que esquilman los montes de titularidad municipal sin tener consideración por el entorno. Así lo ha denunciado en multitud de ocasiones la Sociedad Micológica de Boal, que reclama una normativa que haga compatible una actividad micológica con regulación y la sostenibilidad y el respeto por los montes.
Ferrera señaló que el Principado trabaja en un decreto que fija "cómo debe ser el aprovechamiento de las setas, y amparar en su caso el reglamento que haga la entidad propietaria para ordenar este uso". El director general considera que se "debe tener una ordenanza" para este fin.
Por último, pide consideración a los aficionados que acudirán estos meses a por setas: "Al igual que somos respetuosos con los bienes de los demás, debemos ser respetuosos con los bienes del Ayuntamiento", afirmó.
Inversión rural
José Antonio Ferrera acompañó en la jornada de ayer a la consejera de Desarrollo Rural y Recursos Naturales, María Jesús Álvarez, en su visita a los municipios de Boal y Villayón, en donde visitó varias obras financiadas por su departamento, y ya rematadas. En total, este año se han invertido 243.246 euros en siete obras, tanto en caminos como en desbroces de montes.
En Boal, se ha reparado el acceso a Silvón, de casi un kilómetro, y se harán desbroces en 147 hectáreas de montes públicos. En Villayón, las obras han servido para mejorar accesos en Lendequintana y Arbón, favoreciendo un aprovechamiento más racional de los recursos.
"Se trata de proyectos que sirven para mejorar el acceso a núcleos rurales, pero también a fincas y a montes, de manera que las personas que trabajan en el medio rural pueden desarrollar su actividad con mayor facilidad", apuntó Álvarez, que cuantificó la inversión en ambos concejos en 1,2 millones de euros desde 2015.
