Una mujer presentó una denuncia en la Policía Local de Valdés tras caer en la plaza de Alfonso X El Sabio. El suceso ocurrió anteayer. Según los testigos, la viandante cayó tras tropezar en un bordillo.

El primer diagnóstico fue un esguince y una contusión leve una mano. Tras el suceso, las críticas al diseño de la plaza no se han hecho esperar. Varias personas se han quejado porque la céntrica plaza está rodeada de bordillos que dificultan el tránsito de personas con movilidad reducida, de edad avanzada o que necesitan algún tipo de aparato, como sillas de ruedas, para desplazarse.

El Ayuntamiento de Valdés estrenó en julio la remodelación de la plaza. El arquitecto que firmó el diseño original renunció a la dirección facultativa de la obra por los ajustes y cambios que realizó el Gobierno. El ejecutivo entiende que la obra tiene el visto bueno de los técnicos municipales. Lo cierto es que los bordillos no tienen en cuenta el acceso a los pasos de peatones. Además, la calle donde antes se encontraba la parada de taxis está separada del espacio central por un bordillo. La intención original era colocar a los taxistas en este carril, donde ahora sólo circulan vehículos de carga y descarga autorizados por el Ayuntamiento.