La directora de la Fundación Princesa de Asturias, Teresa Sanjurjo, se convirtió ayer por sorpresa en "Madrina de honor" del programa "Padrinos y Madrinas de la lectura", que desarrollan desde hace cuatro cursos la biblioteca Menéndez Pelayo de Castropol y el colegio La Paloma. Sanjurjo calificó la iniciativa de "estupenda" y aplaudió la "labor intensa para fomentar el hábito de la lectura entre los escolares" que desarrollan desde hace tiempo ambas entidades.

La responsable de la Fundación, que impartió una charla titulada "La importancia de leer para llegar a escribir: Los Premios 'Princesa de Asturias' de las Letras", no escatimó en halagos a la biblioteca Menéndez Pelayo. "El origen de esta biblioteca es para estar muy orgullosos", indicó, al tiempo que explicó a los escolares participantes los inicios de la institución como biblioteca popular circulante.

En este sentido, recordó unas palabras de la bibliotecaria y filóloga María Moliner, que en su momento se refirió a la institución diciendo: "Ojalá hubiera mil Castropoles para España". Así que, continuó Sanjurjo, "imaginaos lo importante que es esta biblioteca".

Teresa Sanjurjo, con raíces familiares en Castropol y asidua visitante del concejo, desveló a los estudiantes que cuando de niña visitaba a su familia acudía a diario al centro lector, entonces ubicado donde hoy está el centro de salud. "El afán de leer lo enganché en la biblioteca de Castropol", aseguró.

Con su discurso ágil se ganó rápidamente al público infantil, al que invitó a leer frases de algunos de los literatos premiados con el "Princesa de Asturias" de las Letras como Leonardo Padura, Philip Roth o Paul Auster. Aseguró Sanjurjo que su conclusión tras escuchar sus reflexiones es que "para escribir antes fueron lectores, y todos empezaron a leer a vuestra edad".

La directora de la Fundación se presentó en Castropol acompañada de la escultura de Miró que se entrega a cada premiado y ofreció a los pequeños la oportunidad de tocarla y descubrir su peso. "Cuidado con los pies", bromeaba Sanjurjo, ya que la estatuilla es especialmente pesada, razón por la que no se entrega a los premiados durante la ceremonia sino que se les envía directamente a su casa. Esta circunstancia llamó especialmente la atención de los escolares.

Al finalizar el acto, los alumnos de La Paloma sorprendieron a Sanjurjo nombrándola "Madrina de la lectura", un cargo que ostentan también la escritora Rosa Navarro y la directora de la Biblioteca Nacional, Ana Santos. El programa "Padrinos y madrinas de la lectura" agradece así el apoyo que Sanjurjo ha dado a la iniciativa desde su origen.

Este programa lector consiste en esencia en que los mayores del centro escolar se conviertan en padrinos y madrinas de la lectura de los más pequeños del centro. A lo largo del curso se determinan momentos de lectura en los que se va tejiendo una relación especial entre los escolares. El programa también incluye algunos regalos de lectura para los padrinos, como la visita que ayer realizó Sanjurjo.