El consejero de Infraestructuras, Fernando Lastra, se reunió ayer con los vecinos afectados por las obras de la carretera castropolense Samagán-Lagar para hablar de los trabajos, iniciados el día 7, y para comentar los itinerarios alternativos durante los dos años y medio de ejecución previstos. "Es una obra complicada de 11,5 kilómetros y vamos a tratar de que les afecte lo mínimo posible a su vida diaria", apuntó el Consejero, consciente del malestar vecinal causado por esta vía que acumula años de retraso, el último por la rescisión del contrato con la anterior adjudicataria.
La dirección de esta obra, adjudicada a Alvargonzález Contratas, ha diseñado una circunvalación completa de 19 kilómetros para evitar la vía durante las obras y garantizar la circulación en todo momento. No obstante, según explicaron ayer, la carretera no se cerrará al tráfico de manera permanente. Serán cortes temporales y se reabrirá cada noche y durante los fines de semana. También se han dispuesto desvíos para que todos los pueblos ubicados en la vía tengan una salida alternativa.
