A partir del lunes la concejala socialista Araceli Soárez se convertirá en la alcaldesa en funciones de Degaña. Un cargo que asume después de que el alcalde, José María Álvarez, haya decidido aceptar un puesto de trabajo en Correos que le ha llevado a trasladarse a Madrid.

La renuncia al cargo por parte del alcalde aún no es firme, ni siquiera está presentado su escrito de dimisión en el Ayuntamiento, pero Álvarez espera poder hacerlo en los próximos días. "En la FSA me pidieron un poco de tiempo antes de presentar la dimisión y así lo hice pero espero hacerlo la semana que viene, porque no quiero que se alargue esta situación", explica Álvarez.

Por su parte, Araceli Soárez, que se estrenará como alcaldesa el lunes, ha preferido no hacer declaraciones sobre esta nueva etapa ni tampoco desvelar si será ella la candidata a asumir de forma definitiva el mando del Ayuntamiento degañés una vez que sea efectiva la renuncia a la alcaldía de José María Álvarez.

La intención de éste es dimitir tan solo de su cargo y mantener su acta de concejal socialista dentro de la corporación, que está formada por nueve ediles: tres del PSOE, dos de IU, dos de PCPE, uno de Foro y otro del PP.

Los concejales de la oposición entienden la decisión tomada por el Alcalde y coinciden en recordar que estuvo tres años al frente del Ayuntamiento sin percibir una retribución. No obstante miran al futuro con cautela.

Miguel Ángel Fernández, de Foro, espera que quien asuma la alcaldía "respete el trabajo que hicimos y saque adelante las obras que hay pendientes de ejecutar, hay unos presupuestos aprobados y sería un atraso para el municipio que no se siguiera con ellos", señala.

Ángel Álvarez, de IU, está pendiente de mantener una reunión con los afiliados para decidir cuál será su función en esta nueva etapa. Mientras llega ese encuentro, "dejaremos que siga gobernando el PSOE y cuando se hagan cosas coherentes lo apoyaremos y cuando no, no lo haremos". Sobre todo, espera que quien salga elegido alcalde "mire por el concejo".

Además, ensalza la labor de José María Álvarez en el Ayuntamiento. "Trabajé muy a gusto con él porque es una persona que se preocupa por el concejo y lo hizo desinteresadamente, y considero que fue la relación que mantuvo con el PSOE local lo que frenó que llegase más inversión desde el gobierno regional".

Tanto Foro como IU han sido los principales apoyos del regidor socialista durante todo el mandato, especialmente, en este último año cuando decidió romper abiertamente con su equipo de gobierno, formado por la citada Araceli Soárez y Cristina Collar, quien dejó su acta por las desavenencias internas y fue sustituida por Víctor Amigo.

Ambas habían votado en contra de los presupuestos de 2017 destapando así la crisis interna entre el gobierno degañés y del PSOE local. Unos meses después de la votación de las cuentas la situación se agravó cuando el Alcalde decidió retirar sus competencias a las concejalas sin previo aviso, lo que distanció aún más al Alcalde de sus compañeras de partido mientras continuaba su acercamiento a los ediles de la oposición, que en este año le han permitido sacar adelante nuevamente las cuentas en un pleno al que los ediles socialistas no asistieron.