Cuatro familias del concejo de Tineo que se han quedado sin plaza para escolarizar a sus hijos en el colegio público El Pascón piden a la Consejería de Educación que permita al centro, situado en la villa, contar con una segunda unidad de Educación Infantil para niños de 3 años con el fin de dar cabida a la demanda de 27 matrículas que tiene.
El Pascón es el único colegio del municipio que ofrece servicio de comedor, por lo que muchos padres quieren matricular en él a sus hijos para facilitar la conciliación entre la vida laboral y familiar. "Están anteponiendo un criterio económico a las necesidades que tenemos estas cuatro familias", lamenta Vanesa Fernández. Los padres de los alumnos excluidos mantuvieron reuniones con representantes de la Consejería de Educación, pero se encontraron con una negativa a su demanda por motivos económicos y ante la existencia de plazas en otros centros del municipio.
Dos de las familias son de Tineo capital y las derivan al otro colegio de la villa, una opción que no barajaron por la falta de servicio de comedor. "Si el otro colegio tuviese comedor y el mismo horario no habría problema, pero no es una opción para familias en las que los dos progenitores trabajan", apunta María Fernández. Coincide con ella Virginia Fernández, que critica que el gobierno hable de trabajar por la igualdad y "a la hora de la verdad prime lo económico frente a la necesidad de conciliar de cuatro familias".
En el caso de los hijos de Vanesa Fernández, de Bustellón, y de Fabián Martínez y Lucía Fernández, de La Estrella, la opción que les da la Consejería son sendos colegios rurales agrupados en los que los escolares también finalizan las clases a mediodía y no disponen de comedor. "Nos dan opción de transporte escolar a Gera, mientras que el resto de niños del pueblo viene a El Pascón", señala Fabián Martínez.
La única solución que encuentran los padres afectados por la exclusión es que se permita desdoblar el curso de Infantil como se hizo el año pasado. Su petición cuenta con el respaldo de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos, cuya presidenta, Mónica de la Piedad, asegura que lleva haciéndose desde hace cinco años y defiende que debe buscarse "el bienestar de los niños".
Para conseguir que se tenga en cuenta su reclamación, los padres no descartan movilizaciones.
