Pasó cien días en soledad en el Parque Natural de Redes, desconectado absolutamente del mundo y de los avances tecnológicos, y ahora aconseja a los jóvenes no perder el tiempo mirando a una pantalla. "Ese aparatín que lleváis en las manos utilizadlo para cosas interesantes; intentad no perder el tiempo con él", recomendó el naturalista y fotógrafo asturiano José Díaz a los alumnos del instituto de Navia, con los que pudo compartir un pequeño coloquio tras la proyección de su cinta "100 días de soledad". Díaz también subrayó la importancia de poner pasión en su vida, "para lo que es imprescindible la pausa y concentrarse".
El autor del documental, que ha sido comprado por la plataforma Netflix y que ha llegado a festivales de medio mundo, confesó en Navia que ahora es alguien afortunado: "Tengo el lujo de hacer absolutamente lo que quiero, nadie me dirige, y también el lujo de poder vivir con muy poco", algo que debe, en parte, a su experiencia en el bosque.
José Díaz recordó cómo una charla de Félix Rodríguez de la Fuente le abrió los ojos cuando era joven, siendo un punto de partida para desarrollar ese amor por la naturaleza que ahora manifiesta. Y animó a los jóvenes a buscar "aquello por lo que sintáis pasión, que será lo que realmente os guste y dé sentido a vuestas vidas". "Con pasión llegaréis a hacer cosas importantes", añadió.
Los estudiantes se interesaron por la preparación necesaria para rodar una cinta de estas características, preguntaron si había visto lobos durante su estancia en el bosque, y también sobre la figura de "Atila", el caballo que acompañó al protagonista durante esos más de tres meses. De aquella experiencia, Díaz apuntó que ha sacado tres lecciones. Por un lado, la importancia de cuidar y mantener la naturaleza, "que es necesaria para todo". Por otro lado, "que se puede vivir con mucho menos de lo que pensamos", ya que su vida en la cabaña se simplificó al extremo. "Cuanto más simple, más tiempo hay para disfrutar de la vida", dijo.
Finalmente, Díaz destacó que, en su opinión, "se vive mucho mejor fuera del barullo que en el barullo".
