Una treintena de boaleses celebraron ayer el regreso a su lugar de origen del Penedo Aballón, en la sierra de Penouta. Lo hicieron con una marcha desde el Ayuntamiento. Una vez allí, bajo la niebla y acompañados de la música de la gaita, admiraron la gran mole (en la foto), que sufrió un acto vandálico en 2001, informa D. Á.