La venta del palacio de Jardón, ubicado en la localidad franquina de Viavélez, no termina de fructificar. Pese a que el año pasado, en la segunda subasta celebrada, hubo una oferta firme y se dio por hecha la venta, lo cierto es que la operación no culminó por "complicaciones jurídicas". Así lo confirman fuentes cercanas a los propietarios, que esperan que el Juzgado convoque próximamente la tercera subasta.
En septiembre del año pasado se desarrolló la segunda subasta con un precio de salida notablemente inferior a la primera puja, celebrada en 2015 y declarada desierta después de que el único ofertante planteara una cifra muy por debajo del precio de salida. En la primera ocasión, que se desarrolló de manera presencial en el Juzgado de Castropol, se fijó un precio de salida de 2.966.551 euros, cifra que fue rebajada el año pasado hasta 1.349.780,71 euros.
Poco antes de cerrarse la segunda puja, en este caso de manera electrónica a través de un portal dependiente del Ministerio de Justicia, se presentó un único comprador, que planteó una oferta 2.000 euros por encima del precio de salida. Sin embargo, tras meses de trámites y esperas finalmente no fue posible formalizar la venta. Todo apuntaba a que la reducción del precio facilitaría la venta de este inmueble, que busca comprador desde 2011, cuando se intentó la operación a través de una inmobiliaria. Sin embargo, las desavenencias entre los herederos de la propiedad dificultaron el proceso y abocaron a su subasta.
El palacete (denominado oficialmente Villa San Jorge aunque conocido popularmente como palacio de Jardón) se construyó en 1918 siguiendo el estilo barroco francés. Cuenta con cuatro plantas y tiene una superficie habitable de 2.000 metros cuadrados. El paquete de venta no solo incluye este imponente caserón, sino también las edificaciones anexas (la casa del jardinero, la casa del mecánico y la casa de vacas) y la finca San Jorge que lo rodea, así como tres terrenos en las inmediaciones del inmueble.
