El vecino cangués Benjamín Menéndez, de Vega del Rey, ha tenido que recurrir a los tribunales para conseguir paralizar los requerimientos municipales de los meses de abril y mayo de 2017 que le exigían realizar un muro de mampostería para impedir que un terreno de su propiedad se desprenda sobre la carretera municipal que cruza el pueblo hasta San Julián de Arbas. Una vía sobre la que el Ayuntamiento había realizado una obra en 2009 y para la cual el padre de Benjamín Menéndez había cedido sin coste las fincas colindantes a la calzada, con el único requisito de que se repusieran los cierres existentes previamente a la actuación.

La sentencia del pasado mes de junio exime de responsabilidad al vecino y atribuye los problemas de argayos "a la defectuosa ejecución del proyecto de la carretera", explica su abogado, Javier Junceda, quien matiza que en la propia sentencia se recoge que en la obra de la carretera estaba prevista una escollera que no se realizó. "En el proyecto de ejecución estaba prevista una escollera que no se ejecutó, al menos en el punto en el que estaba fijado en el proyecto, sin haber realizado modificado alguno ni hecho mención a las razones de esta variación", recoge la sentencia en sus fundamentos jurídicos.

La propia sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 concluye que la modificación realizada en el proyecto "no reflejada ni justificada en el mismo" y que supuso que no se ejecutase la escollera prevista para evitar los argayos desde la finca del vecino de Vega de Rey a la carretera, "impide atribuir la causa de los desprendimientos a un defectuoso mantenimiento del terreno por parte del propietario".

Así, en la sentencia se estima parcialmente el recurso contencioso administrativo presentado por el vecino Benjamín Menéndez y se anulan, "por no ser ajustadas a derecho", las actuaciones administrativas iniciadas por el Ayuntamiento.

Devolución de la multa

Menéndez tuvo que pagar una multa de 1.160 euros por no ejecutar los trabajos exigidos por la administración local, un dinero que ahora exigirá le sea devuelto con intereses. Asimismo, solicitará que el Ayuntamiento se haga cargo de reparar la zona de desprendimientos que llegan a la carretera "para evitar que el argayo siga reproduciéndose en el futuro". El Ayuntamiento había presupuestado estos trabajos en unos 6.000 euros.