El paisaje de Villar de Luarca, cerca de los centros de enseñanza, empieza a cambiar. La empresa adjudicataria del nuevo juzgado de instrucción avanza en su construcción a buen ritmo.

Según el contrato, el plazo de ejecución de la sede judicial es de quince meses. Los trabajos empezaron el pasado julio y, si no hay ningún contratiempo, concluirán en el otoño de 2019.

El presupuesto de adjudicación ascendió a 1.523.062 euros. Está dividido en dos anualidades: 417.825 euros en 2018 y el resto, es decir 1.105.237 euros, el año próximo.

El edificio pone fin a décadas de protestas. El juzgado de Luarca pasará así a Villar y dejará el piso en el que se encuentra en la actualidad, en la avenida de Galicia de la capital valdesana. Los principales inconvenientes de la sede actual son las barreras arquitectónicas (para acceder hay que subir escaleras) y la falta de espacio. Los trabajadores también se quejan del estado de las instalaciones, muy deterioradas.

El nuevo edificio, por contra, aparte de ser obra nueva, incorpora tecnología de vanguardia.