"No se convocó a los ediles al Pleno por Whatsapp, lo que se les pidió por esta vía es que pasaran por las oficinas municipales a por la convocatoria, que se les adelantó digitalmente", aclara la alcaldesa de Tapia, Ana Vigón, respecto de la queja del PP sobre el uso de esta aplicación móvil para convocar a las sesiones plenarias. La regidora, muy molesta con los ediles del PP, lamenta su poca consideración dada la situación del consistorio: siguen sin secretario, un puesto clave en un ayuntamiento, y hay muchos empleados de vacaciones, entre ellos el policía municipal que acostumbra a llevar las convocatorias personalmente a los concejales.

"Estamos en una situación administrativa muy complicada y la oposición lo que hace es poner una dificultad añadida", señaló ayer Vigón, precisando que el aviso telefónico se hizo el martes, "con el doble del tiempo legal" exigido para convocar un Pleno.

El problema más grave es que desde finales de julio Tapia está sin secretario, lo que ralentiza las labores cotidianas y, por ejemplo, para celebrar el Pleno de esta tarde, el equipo de gobierno ha tenido que solicitar una asistencia técnica al Principado. El Gobierno regional indicó a Vigón que la sesión debía ser extraordinaria, algo que también criticó el PP explicando que este mes correspondía celebrar un Pleno ordinario.

Tapia intentó en primer término cubrir la plaza de secretario (el anterior se jubiló en julio) con una convocatoria dirigida a funcionarios con habilitación nacional y que quedó vacante. Incluso se contactó con una persona con esta cualificación que estaba dispuesta a asumir el puesto, pero finalmente lo rechazó por problemas personales. Ahora el puesto saldrá de forma interina y la convocatoria se publicará en el boletín la semana que viene. "Lo que hacemos es intentar que el ayuntamiento siga funcionando", precisa Vigón.

En el Pleno de hoy a las cinco se dará cuenta de la dimisión de Emilio Reiriz y también tomará posesión como edil Natividad Fernández.