La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El inventor ibiense expone sus creaciones en la Feria de la Miel

"Mi objetivo es vender las patentes", afirma el apicultor que ha hecho autónomo el ahumador eléctrico y ha creado un cepillador

abejas. D. Á.

Los inventos del ibiense Antonio López Barrero, "Toño", para facilitar el trabajo de pequeños apicultores como él se expondrán por primera vez al público este fin de semana en la XXXII Feria de la Miel de Boal. Toño López ha ideado en menos de dos años hasta seis útiles pensados para que una persona sola pueda realizar de manera sencilla la mayor parte de las labores de la extracción de miel y asegura que en su mente aún tiene varias propuestas más que está madurando.

Sus últimas invenciones tienen aplicación en el momento justo en el que se comienza el proceso de obtención de la miel, cuando se sacan los panales de las colmenas. Por un lado, ha convertido un ahumador eléctrico en un producto autónomo y, por otro, ha creado un cepillador de abejas.

En el primer caso, lo que ha hecho Toño López ha sido añadir diferentes piezas a un producto que ya está en el mercado, el ahumador eléctrico, para convertirlo en un aparato que no necesita estar accionado por una mano para su funcionamiento. Para lograrlo, el inventor ibiense tuvo que crear un fijador que mantiene pulsado constantemente el botón de inicio del aparato para que éste suelte el humo de forma continua y un soporte de hierro con una pinza para fijarlo a la colmena donde se cuelga el ahumador, que de este modo podrá estar soltando humo sobre la colmena para calmar a las abejas mientras el apicultor la inspecciona o trabaja en ella.

Además, le hizo un par de modificaciones más para mejorar su forma de funcionar. "Le puse un filtro en el acceso de aire para regular su entrada, ya que si entra mucho puede llegar a producir llama. También le añadí una rejilla en la zona superior del bote ahumador para impedir la salida de restos de combustible", dice.

Mientras está accionado el ahumador, el apicultor puede sacar los cuadros con los panales de la colmena y lo primero que debe hacer entonces es cepillarlo para retirar las abejas que se hayan podido quedar adheridas a él. Para ello, Toño López ha creado un cepillador. En un soporte de madera ha enfrentado dos cepillos con el espacio suficiente para permitir deslizar entre ellos el panal y también le ha añadido una pinza para poder fijarlo a un lateral de la colmena. "Son cosas sencillas con las que se consigue ahorrar tiempo y agilizar el trabajo", subraya su inventor.

Ambos inventos formarán parte de la exposición que Toño López llevará a Boal mañana y que la gente podrá admirar durante todo el fin de semana. Completarán la muestra las cuatro creaciones anteriores del ibiense. La primera fue el desoperculador, que da rapidez al trabajo de eliminar la cera de los panales antes de extraer la miel; le siguió la creación de una tapa para limpiar las impurezas del producto una vez extraído.

Luego llegaron el abrevadero para abejas, un pequeño punto de agua adaptado a los insectos para facilitarles el transporte del líquido a la colmena; y la caldera para fundir cera, que permite obtener un producto depurado para su venta.

"Mi objetivo es poder llegar a vender las patentes de mis inventos para que puedan ser fabricados y comercializados", señala López Barrero, quien espera que participar en la Feria de Boal le permita conocer gente del sector apícola que pueda estar interesada en el proyecto.

"Puede ser una oportunidad para que surja algo, pero también servirá para mostrar a la gente lo que se puede hacer", añade este apicultor que tiene en su pueblo natal, Uría, una veintena de colmenas y truébanos.

Compartir el artículo

stats