El libro "Y al final... todos calvos" habla de cómo se vive la vida, porque a partir de su trabajo como médico, Inmaculada González-Carbajal observa que muchos cuadros médicos están relacionados con una carencia importante: "No dar sentido a la existencia".

En Luarca, la obra tiene un eco especial. Las seis ilustraciones "con colores africanos" y hechas con tintes y acuarela las firma el artista local Vicente Pastor. Para él, participar en este proyecto "es una oportunidad" profesional y de crecimiento personal. Ambos autores intentan, cada uno desde su trabajo, ensalzar un mensaje: ese que dice que la felicidad "hay que buscarla dentro de cada uno". Es decir, añade González-Carbajal, "desde lo que eres y lo que tienes". Mucho de lo contenido en el libro tiene que ver con lo que vive la autora en sus viajes, son relatos de vivencias. Por ello no puede faltar la vertiente solidaria. Desde la Fundación que creó "El pájaro azul" intenta mostrar las necesidades de una zona de África. De hecho, todo lo recaudado con el libro, que se puede comprar en la presentación (mañana a las 20 horas en la Casa de Cultura de Luarca), se destinará a un proyecto de El Congo. En él participar a una monja asturiana, Sor Ángela, oriunda de Panes, "que está haciendo un trabajo increíble con enfermos mentales" en Kinsasa, la capital congoleña.

En la presentación se hablará del sentido de la vida y de la felicidad, y también se proyectarán los trabajos de Vicente Pastor. "Lo importante no es dejar de sentir miedo o frustración, es aprender y seguir por el camino adecuado", dice la autora, quien subraya que no se trata de un libro de autoayuda.