El comedor del colegio público Obanca, de Cangas del Narcea, se quedó sin cocinera el pasado lunes al caer de baja la persona que realizaba el trabajo. Durante estos cinco días ha tenido que ser la ayudante de cocina en solitario la que ha tenido que sacar adelante un menú para los 150 alumnos del centro.

Según los padres, esta situación modificó sustancialmente el menú que se servía a los escolares. Caracterizado habitualmente por seguir una dieta equilibrada con presencia de verduras, pescado y carne, en esta semana se introdujeron comidas como pizza, fritos o empanada.

El regidor asegura que desde el primer momento la Consejería buscó en la bolsa de empleo la sustitución de la cocinera y fue ayer por la tarde cuando le confirmaron que para el martes ya habría una nueva trabajadora en el comedor del colegio. La comida que se servirá el lunes será contratada al catering de un restaurante de la zona.