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Luarca contará con cinco cámaras más para vigilar dos accesos y el parking de La Curtidora

Los aparatos, con un coste de 30.500 euros, permitirán ver las matrículas de todos los vehículos incluso de noche y con mala meteorología

Acceso a Luarca desde Villar, uno de los puntos que pasará a estar videovigilado. A. M. SERRANO

La villa de Luarca tendrá más zona videovigilada, blindando así sus accesos principales. La junta de gobierno de Valdés acaba de dar luz ver a la compra de cinco nuevas cámaras que se instalarán en la entrada a la villa desde la carretera nacional 634 (Barrio Nuevo, cerca de la gasolinera) y la carretera del faro (Villar, cerca del colegio José García Fernández). El parking de La Curtidora será otra zona con cámaras.

El objetivo es "captar y grabar todos los vehículos que accedan por dichos puntos en los dos sentidos, pudiendo captar su matrícula perfectamente tanto de día como de noche e incluso en condiciones climatológicas adversas", según el informe de la Policía Local.

El presupuesto de licitación con IVA incluido es de 30.578,50 euros. La empresa tendrá un plazo de 30 días para instalar todo el sistema, razón por la que se espera que el nuevo sistema empiece a funcionar en el primer trimestre de 2019.

La medida obedece a la necesidad de tener "más control", según indica el Alcalde, Simón Guardado, quien considera que con este nuevo planteamiento la villa gana en seguridad. Para lograr instalar cinco cámaras en puntos hoy por hoy sin vigilar de la capital valdesana, fue necesario el consentimiento de la Delegación del Gobierno y esperar por una "larga tramitación", reconoce el alcalde.

Las imágenes se podrán visionar de nuevo, siempre en caso de ser necesario, y habrá opción de buscar de forma rápida qué pasó en un momento determinado en un lugar concreto gracias a un preciso buscador.

Los aparatos de grabación se controlarán en todo momento desde las oficinas de la Policía Local de Valdés. Son, además, una apuesta del nuevo jefe de la policía local, Carlos R. García, que con este proyecto trata además de integrar y gestionar en un nuevo sistema, más moderno y rápido, todos los puntos de control de vídeo que funcionan en la villa hasta la fecha.

En el caso concreto del parking de La Curtidora, con la compra e instalación de tres nuevas cámaras se concreta una petición vecinal, ya que el edificio se encuentran en la carretera que lleva a La Capitana, en una zona oscura. Luarca cuenta con otras zonas videovigiladas en el centro de la villa. Están dirigidas, preferentemente, a evitar destrozos en zonas públicas.

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