La capilla de Santiso del barrio bodeguero de Cangas del Narcea ya está casi lista para celebrar su milenario. Luce recién pintada, con arreglos en el tejado y nuevas baldosas en un banco exterior, gracias a la inversión vecinal de 1.500 euros. El objetivo es que para el día en el que se conmemorarán los mil años de historia del templo en honor a Santiso, el próximo 28 de abril, se pueda, además, restaurar la imagen del santo y el retablo.
"Queremos arreglar, al menos, una de las dos obras porque el santo costará unos 2.000 euros y el retablo, 9.000; hay que sanearlo y restaurarlo para devolverle la policromía que tenía", explica Joaquín Fernández, presidente de la asociación cultural "Santiso y Llamas". Para ello, esperan contar con el apoyo económico de la sociedad establecida entre el Ayuntamiento cangués, la asociación "Tous pa tous" y el Arciprestazgo, que buscan ir recuperando y restaurando los elementos religiosos del concejo.
Se trata de un año especial para el barrio cangués y su capilla, que sus vecinos no quieren que pase desapercibido. Aunque la antigüedad de la capilla puede que sea anterior al año 1019, esta es la fecha que se ha querido acuñar como la de la fundación de lo que, en un principio, fue un monasterio. "Lo que sabemos con certeza es que en 1019 ya estaba hecha, es una información que nos aporta el 'Libro de registro de Corias' traducido por el catedrático Alfonso García Leal en el año 2000; teníamos otras fechas como 1013, pero no eran fehacientes por los cambios que se hicieron en el calendario en el siglo XIII, así que preferimos esperar a ahora para que el milenario fuera cierto", señala Fernández.
Según se recoge en el "Libro de registro Corias", el monasterio fue fundado por dos familias: los Tellos y los Tructinos. Sin embargo, en 1031 pasó a formar parte del monasterio de Corias, al ser donado por Bermudo III a los condes Don Piñolo y Aldonza, impulsores del monasterio de San Juan Bautista de Corias.
"Los monasterios siempre se ubicaban en zonas llanas, al lado del río, para aprovechar los terrenos para su producción, y toda la zona próxima al actual Santiso eran heredades de este pequeño cenobio que se subdividió mucho hasta pasar al monasterio de Corias", señala Joaquín Fernández, quien apunta que, durante años, fue un lugar de culto y no fue hasta 1336 que se comenzó a impulsar el desarrollo de la vid de la mano de los priores Juan II y Pedro Peláez.
No obstante, tuvieron que pasar varios siglos más hasta que Santiso se fue convirtiendo en el barrio bodeguero que se conoce hoy. A principios del siglo XVIII, se instaló el lagar con la prensa de viga, que hoy en día forma parte del Museo del Vino de Cangas, y alrededor de él se comenzaron a fundar las bodegas de los vecinos de Llamas. "La prensa se quedó abajo porque con los medios de la época era imposible transportar la viga al pueblo; además, las bodegas tenían que estar siempre cerca de cursos de agua para lavar las maderas", apunta.
Mientras, el monasterio se transformó en la capilla actual, que fue sufriendo continuas modificaciones a lo largo de los años. Aunque hasta nuestros días han logrado llegar dos canecillos originales. También se descubrieron tumbas medievales durante la década de 1960, cuando se realizaron excavaciones para llevar a cabo la primera traída de agua para el barrio.
"La última reforma fue la incorporación de una espadaña y la campana a un lado de la capilla, una campana que venía del actual local parroquial situado en la calle Mayor. Sobre 2004 se arregló el tejado y se colocó una cruz", añade el presidente de la asociación cultural.
Antes de que llegue la celebración del milenario de Santiso, el barrio celebrará la fiesta en honor a su patrón. El 28 de enero, día del santo, se celebrará Santisón, mientras que el domingo 3 de febrero será cuando tenga lugar la romería de Santiso, con misa, procesión, fiesta y cata popular de vinos caseros, para la cual la inscripción de los productores estará abierta hasta el próximo jueves 10 de enero.
