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Nueva oleada de robos de madrugada en cuatro locales hosteleros de Tineo y Cangas

"Estamos intranquilos, da respeto venir solo a trabajar porque no sabes si pueden hacerte algo", aseguran los empresarios afectados

Los establecimientos hosteleros de Cangas del Narcea y Tineo fueron otra vez blanco de los ladrones la madrugada del domingo, y esta vez los robos se produjeron dentro de las propias villas. El convencimiento general es que fueron las mismas personas las que actuaron en los cuatro locales afectados.

En Tineo actuaron primero. En la villa tinetense escogieron dos bares cafetería donde las máquinas tragaperras y las cajas fueron los principales objetivos. En la cafetería Alhambra entraron a través de la puerta de la cocina, tras reventar la cerradura. El principal destrozo que causaron los cacos fue el de la máquina de tabaco, que quedó inservible y supone un coste de 7.000 euros. De allí se pudieron llevar el cambio que se encontraron en la caja registradora y en la cocina, el dinero de la máquina recreativa y de la del tabaco, además de su mercancía.

Sus dueños se percataron de lo sucedido cuando acudieron a prepararse para la apertura, sobre las cinco y media de la madrugada. "Es la primera vez que nos roban, estamos en un pueblo tranquilo donde nos conocemos todos, y ahora estamos intranquilos, da respeto venir solo de madrugada a trabajar porque no sabes qué tipo de gente es ni si además de robar pueden hacerte algo", señala la propietaria, Marta Mon.

En el bar El Balagar la alarma alertó a su dueña de la intrusión, y en su piso, situado encima del local, pudo ver a través de las cámaras a los ladrones, pero en ningún momento se planteó bajar a hacerles frente por miedo a lo que pudiera ocurrir. "La peor parte siempre nos la íbamos a llevar a nosotros si salimos a por ellos; fastidia que roben, pero mientras no haya otro tipo de daños?", se resigna Davinia Bueno. En su caso también accedieron forzando la cerradura de una puerta lateral del bar y se llevaron el dinero de las máquinas de juego y de la caja.

Los robos continuaron en Cangas del Narcea, en la pizzería Canto y el bar homónimo que regenta Ana Fernández y que están situados uno al lado del otro, en el Barrio Nuevo. La recaudación de las máquinas tragaperras y las cajas fueron una vez más el botín de los ladrones, que se calcula que pudieron estar en los locales entre las cuatro y media y las seis de la mañana. El aviso del robo lo dio una vecina que pasó por la zona temprano para ir a trabajar al ver que en el bar habían roto la verja y la luna. Mientras, en la pizzería, que sufrió ya otro robo en enero de 2018, forzaron la cerradura de la puerta para entrar. "Por la forma de actuar parece que puede ser una banda profesional, venían equipados con una máquina para reventar las cerraduras", explica Fernández.

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