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Castropol y Coaña, con la lectura familiar

"Si creces en un hogar lleno de libros, tendrás más posibilidades de llegar a ser lector", defienden las bibliotecarias en su nuevo programa

Ana María Méndez lee un cuento vestida de bruja para cerrar el encuentro de ayer en la biblioteca de Castropol. T. CASCUDO

"Somos muchos los agentes que trabajamos favoreciendo la lectura, pero donde verdaderamente se convierte en natural el hábito de leer es en el hogar, pues es donde los niños ven el libro como parte de la familia", defendió la bibliotecaria de Coaña, Ana María Méndez, en la primera actividad del programa "La biblioteca con las familias". Esta iniciativa, impulsada de manera conjunta por la "Gonzalo Anes" y la "Menéndez Pelayo", de Castropol, busca ayudar a las familias en su papel fundamental como dinamizadoras de la lectura.

El primer consejo que ofrecieron a los participantes, principalmente familias y personal docente, es que la lectura "necesita paciencia y tiempo" y que debe ser una aliada en la crianza de los niños desde su nacimiento. "Pensamos en sus necesidades y a veces obviamos la importancia del contacto con los libros", indicó la bibliotecaria coañesa. Los cuentos deben estar en el hogar desde temprana edad y accesibles a los más pequeños. Y, sobre todo, destacaron las profesionales, nunca debe obligarse a leer ni se deben usar los libros como un castigo: "Hay que destronar esa práctica".

"Si creces en un hogar lleno de libros, tendrás más posibilidades de llegar a ser lector. Los niños hacen lo que ven", apuntó la bibliotecaria de Castropol, Manuela Busto, que ayer ejerció de anfitriona de esta primera sesión en la que ejercieron como ponentes la bibliotecaria coañesa y la trabajadora social María Grata Maseda. Esta última disertó sobre la parentalidad positiva o la educación de los niños desde el respeto a sus derechos. En este sentido, explicó que la tarea de educar requiere de "tiempo, paciencia y coherencia", y es clave, como en el hábito lector, que las familias ofrezcan un buen modelo a seguir a los niños.

La segunda cita de este singular programa, abierto al público en general y que no requiere inscripción previa, será el próximo martes en la biblioteca de Coaña y estará centrada en las emociones. En todo caso, Busto indicó que es un programa abierto a las inquietudes y sugerencias de los participantes con el objetivo "de crecer juntos e ir avanzando".

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