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Luarca respalda al cura de Tapia, ofendido por la recreación de una misa en Carnaval

"Hay límites", admite la presidenta de la Sardina Carnavalera en Valdés

Recreación de una misa en el entierro de la Sardina en Tapia. T. C.

La crítica del párroco de San Esteban de Tapia, Andrés Pérez Díaz, a la celebración del Entierro de la sardina durante el Carnaval por "ofender" a los católicos al recrear una misa ha generado revuelo entre los colectivos culturales de la zona.

En el Occidente, sólo en la capital de Valdés, Luarca, se celebra el entierro de la Sardina con un desfile y la quema del muñeco. La presidenta de la Asociación Sardina Carnavalera de Valdés, Carmen Moyano, respalda la opinión del cura. "En Carnaval también hay límites" destaca. De hecho, la organización "nunca acepta" atuendos ofensivos en sus desfiles y considera que hay que tener prudencia: "Antes de ponerte un disfraz tienes que pensar".

Moyano también lamenta que el entierro de la Sardina de Tapia se celebre en plena Cuaresma, algo que puede ofender a los creyentes. "El Miércoles de ceniza es por algo, no podemos inventar fechas", opina. Y subraya que durante el entierro de la Sardina de Luarca la gente va disfrazada de cura o incluso de Papa (sucedió en una ocasión con un expresidente de la asociación), "pero nunca se recrea una misa; el entierro de la Sardina es un desfile que finaliza con la quema de un muñeco, no hay más".

Los Guilandeiros de Tineo tienen otra opinión. En su repertorio teatral esta mascarada que recorre todos los años varios pueblos escenifica una boda en tono cómico. "Siempre llevamos el personaje del cura para hacer el 'casorio'; consideramos que no ofendemos a nadie, recreamos una escena de antaño con un toque de humor", indica Rosa Fernández. "No quemamos santos ni hablamos de la Iglesia o de sus tradiciones por hablar", destaca, y señala que, en caso no poder celebrar este tipo de fiestas en los pueblos, "nos preguntamos qué pasaría con el teatro o con los desfiles de Carnaval". Sí opina que "se debe dialogar con todas las partes" antes de organizar una fiesta de estas características.

La presidenta de la Asociación Cultural "Tío Vitán" (organizadora del desfile de Os Reises en Ibias), Noelia Queipo, considera que "el teatro es eso: teatro". En la mascarada que celebran todos los años se visitan varios pueblos. Un hombre disfrazado de cura va diciendo misa. "Nunca tuvimos problemas y creemos que hacemos eso, un poco de teatro", explica Queipo. En su opinión, los carnavales y las mascaradas, al menos en su concejo, "siempre tienen algo de reivindicativo".

El presidente del Consejo Rector del Festival Vaqueiro y de la Vaqueirada (donde la cita principal es una boda católica y la gente acude vestida de vaqueiro a la cita en señal de respeto y para recordar tiempos de antaño), José Luis Rodríguez, asegura que la sociedad "tiene que aprender a ser respetuosa con las creencias y con las liturgias que éstas llevan aparejadas".

"Es insano satirizar los sentimientos o la fe de cada uno porque esto es inherente a la conciencia personal y esa es intransferible", destaca, y añade que la parodia de la misa del Carnaval tapiego "sin duda no trata de ofender a nadie, pero a la luz de los hechos realmente ha ofendido; por eso soy de la opinión de que antes de hacer algo hay que ponerse en el lugar del otro, y si pasa ese filtro, casi siempre acertaremos". En Tapia, la charanga que participó en el desfile no quiso opinar.

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