El barrio bodeguero de Santiso, en Cangas del Narcea, celebró ayer los mil años de su capilla. Un tejo plantado al lado del templo servirá para recordar la efeméride, en la que participó el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, y en la que los vecinos de Llamas de Ambasaguas y de Santiso no solo miraron al pasado, sino que también lo hicieron al futuro.

"Es importante que recordemos nuestra historia, que sepamos lo que tenemos, porque todavía faltaban 500 años para que Colón llegase a América cuando Santiso ya estaba aquí", recuerda el presidente de la asociación cultural "Santiso y Llamas", Joaquín Fernández. Insiste, además, en que la celebración de este milenario supone "recordar nuestra historia y a nuestros antepasados porque, aunque en la vida no puedes hacer pausas, sí se puede hacer un pequeño paréntesis para mirar al pasado". También reclamó la conservación del patrimonio. "Aprovechamos para pedir al arzobispo una colaboración para restaurar el Santo porque queremos continuar manteniendo lo que tenemos para que las generaciones venideras lo reciban al menos como lo recibimos nosotros", subraya Fernández.

En la historia de la capilla de Santiso ahondó el catedrático Alfonso García Leal, en una ponencia previa a la celebración. En ella relató cómo Santiso fue creado como un pequeño monasterio familiar fundado por las familias de los Tructinos y Tellos en una fecha incierta, aunque insistió en que, "con seguridad", para 1019 ya estaría en pie. También hizo referencia a que se trató de un monasterio activo, con una comunidad de monjas, y que antes de pasar a formar parte de Corias su propiedad se dividió en muchas partes debido a la transmisión hereditaria, lo que hizo que el monasterio de Cornellana y la catedral de Oviedo llegasen a tener pequeñas participaciones en la misma.

La vinculación del barrio de Santiso con el vino no pasó desapercibida en la celebración y dos miembros de la asociación "Tous pa tous", Mercedes Pérez y Benito Álvarez, hicieron un breve repaso por la historia del vino a través de la documentación que se puede consultar en la página web de la asociación. Además, se puso en funcionamiento la antigua prensa del lagar de Santiso, incluida en el Museo del Vino.

La jornada finalizó con una misa a cargo del arzobispo, cantada por un quinteto del orfeón "In-Paradisum".