La Fundación Metal Asturias renuncia a su plan de abrir una sede permanente en La Caridad. Este proyecto, anunciado a bombo y platillo en marzo del año pasado, hubiera supuesto el regreso de la entidad al Occidente, donde estuvo implantada hasta 2012. Sin embargo, motivos "económicos y de operatividad" llevan a la Fundación a desechar este plan, aunque mantiene su compromiso con la formación en la comarca.
Los nuevos planes pasan por ofertar cursos formativos a partir de este mes en el centro de empresas de Novales (El Franco). Para ello, según precisa la directora de Industria, Rosana Prada, se están abriendo "diferentes líneas de colaboración" con el Ayuntamiento de El Franco y, además, se establecerán contactos con las empresas de la zona "para adaptar las diferentes ofertas formativas disponibles a sus necesidades".
El paquete formativo propuesto el año pasado estaba especialmente pensado para la industria naval de la comarca. De hecho, se anunciaron cursos de Autocad, de soldadura y de conformación metálica, uno de conformación de aluminio especialmente pedido por el astillero Armón y otro de fibra de vidrio a petición de Gondán. La entidad aún no ha explicado de qué serán los cursos que ofertará ahora, aunque el compromiso es empezar este mismo mes.
El planteamiento inicial era que en mayo de 2019 comenzarían los cursos en Novales y en julio se abriría el centro, en una nave en desuso ubicada a la entrada de La Caridad. La nave, de 1.000 metros cuadrados, llegó a alquilarse, pero su rehabilitación para convertirla en centro formativo exigía un desembolso demasiado alto que acabó por tirar por tierra el proyecto. En ella estaba previsto crear un aula de formación y doce cabinas de soldadura. Como el espacio había estado ocupado previamente por un taller de forja, la entidad pensaba aprovechar parte de la maquinaria existente.
En 2012 la Fundación Metal cerró el centro que regentó en Jarrio (Coaña) durante diecisiete años y donde se formaron cientos de personas de la comarca. Por eso, el anuncio de su regreso generó mucha expectación en la zona y fue muy aplaudida por los dirigentes locales. Especialmente porque se comprometieron a ofrecer formación específica para el pujante sector naval de la zona, que siempre ha denunciado carencias para encontrar personal formado.
Desde Industria indican también que no se descarta conceder ayudas o becas para que la gente de la comarca pueda desplazarse hasta los centros más próximos a recibir formación.
