La sede de Otur de la cooperativa Campoastur acogió ayer una jornada para titulares de ganaderías de leche en la que los especialistas pusieron de manifiesto la "necesidad" de ajustar los gastos y mirar "por cada céntimo" para generar más beneficios globales.

Las sesiones, que tratan temas de actualidad o que proponen los ganaderos, se dedicaron este año a la huella del carbono y las herramienta de gestión en las explotaciones lecheras, al diseño eficaz de un programa vacunal en el síndrome respiratorio y a la eficiencia alimentaria de las reses.

Para el profesor de nutrición animal Gregorio Salcedo, las explotaciones deben adaptarse a la normativa ambiental "sí o sí" y, por ello, ante el reto de reducir la huella contaminante, más que debatir sobre la tradición, "debemos saber que hay cosas que cambian y romper hábitos". Salcedo indicó que el trabajo de la persona que dirige la explotación ganadera debe centrarse en mirar "por cada céntimo" y en intentar rebajar los costes para hacer más generoso el beneficio. "Hablamos de un céntimo; si puedo producir el litro de leche a 0,29 céntimos de euros, ¿por qué lo hago a 0,30?", se preguntó.

En este sentido, animó a los ganaderos a estudiar qué clase de forrajes se pueden consumir y si verdaderamente hacen falta "y son tan necesarios" algunos productos como la soja, "que es muy cara y a veces recomiendan los comerciales". "Siempre hay que buscar la eficiencia y ver dónde está el agujero económico que puedo evitar, dónde esta la fuga", subrayó.

En la misma línea, el veterinario Manuel Cerviño, con experiencia en ganado de leche desde los años noventa, invitó a los ganaderos a ser "cada vez más eficientes" y pensar cada decisión como si de una gran multinacional se tratara. "Si la venta del producto está acotada y los costes tampoco se pueden reducir demasiado, las explotaciones tienen que producir de forma muy eficiente y es cierto que para ello no existe una fórmula única; sí es necesario saber que cualquier decisión debe tener un respaldo técnico y económico", opinó. Por lo demás, Cerviño transmitió la necesidad de diseñar un buen programa vacunal para garantizar la salud de los animales y evitar desembolsos inesperados. "A veces no se le eligen las vacunas adecuadas por el tipo o la enfermedad de la que se protege y se hace caso omiso a las indicaciones de los fabricantes", criticó. "Por ejemplo, si hay que aplicar varias dosis en un tiempo establecido y no se sigue esa pauta o se modifican esas dosis, los planes fracasan", señaló. En las jornadas se constató que Asturias "es un referente" en ganadería de leche y también "en sanidad animal". A la cita acudieron más de medio centenar de personas.