Dicen que la música es terapéutica y eso lo saben muy bien en Luarca, donde desde los primeros días de confinamiento para frenar la propagación del coronavirus suenan canciones desde un balcón ya "muy especial" para muchos valdesanos. Son piezas para "todos las edades y gustos", como dice el protagonista, Jonatan Suárez, más conocido en el municipio como "Jony Luarca".
Su particular cruzada para ayudar a levantar el ánimo en días tan tristes empezó el martes 18 de marzo. "Pensé que con la música podía conectar a la gente", confiesa este discjockey con una década de experiencia como pinchadiscos. La fórmula para transmitir algo de alegría a todas las casas de su entorno pronto fue ganando adeptos. Tanto, que el alcalde regularizó esta singular actuación, ahora permitida todos los días a las ocho de la tarde. "Puedo pinchar solo cuatro o cinco canciones, pero noto que la gente sale a sus ventanas, que muchos vecinos con los que nunca hablé, están ahí animando", confiesa este joven, que asegura que, pese a la pandemia, el "balconeo" es más divertido que cualquier otra verbena. "Notas que muchas personas están esperando más que nunca ese momento para verse, aunque sea desde la ventana", cuenta. El efecto "Jony Luarca" ha roto además con fronteras. A través de los directos en redes sociales llega a otros países, donde están confinados luarqueses en particular y asturianos en general.
La suya no es la acción que dan fama al concejo gracias a las redes sociales. La banda de música "La Lira" de Luarca también ha puesto su "granito de arena" para que sus componentes sigan en contacto y la música "saque a alguno del aburrimiento". Cada músico con su instrumento, tal y como cuenta el director, Daniel Santos, interpretaron una canción que Nando Agüeros compuso durante su confinamiento. "Los músicos somos de estar juntos, de vernos, de mirarnos... si no podemos hacerlo, pues tenemos que inventar algo", explica Santos. El director de la banda luarquesa, que también lidera la escuela de música de Suances (Cantabria), necesitó 15 días para poder editar el vídeo que ya puede verse en la plataforma "Youtube" y contiene, dice Daniel Santos, un mensaje implícito: "Volveremos en verano".
