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El centro de integración de Cangas del Narcea, a tope: "Están concienciados"

La institución de Penlés organiza tareas a domicilio para, según la directora, mantener la rutina

Por la izquierda, José Manuel Alonso, Manuel Sierra, Jorge Martínez, Bibiana Losas y Celia Rodríguez muestran objetos decorados ellos y por sus compañeros, durante la jornada de puertas abiertas del CAI de Penlés. D. Á.

La primavera, los amigos, la ropa y los complementos son las temáticas en las que se centrarán las actividades que esta semana tendrán que desarrollar los veinte usuarios del Centro de Apoyo a la Integración (CAI) de Penlés, de Cangas del Narcea, en sus casas. Desde que se decretó el estado de alarma, el centro ha mantenido su actividad con las personas con discapacidad que asistían a él utilizando el teléfono como medio de comunicación básico para trasladarles unas rutinas y pautas individualizadas con el objetivo de mantener su buen estado físico, psicológico y anímico.

"Los usuarios son muy diferentes entre ellos y tienen unas necesidades concretas por lo que intentamos trasladar al domicilio los objetivos con los que estábamos trabajando en el centro de forma individualizada", explica la directora, Ana Rosa Arce.

Para ello intentan incorporar actividades de psicomotricidad y de estimulación cognitiva en las rutinas habituales de la casa, para que participen y colaboren en el día a día de su hogar y a la vez sigan trabajando en los objetivos que se habían marcado en el centro. "No es el mismo trabajo que se desarrolla en el CAI, pero lo fundamental es conseguir que estén anímicamente bien y activos", subraya Ana Rosa Arce. Y por ahora lo están logrando. La directora del centro asegura que "están concienciados" con lo que está pasando y no está siendo hasta estos días cuando están empezando a hacer uso del recurso de los paseos terapéuticos. Además, nota en su participación a través de las diferentes redes sociales y vías de comunicación que tienen a su disposición que se mantienen muy activos. "Agradecen las llamadas, colaboran y participan mucho en las actividades que les proponemos, se mandan fotos, cartas y dibujos entre ellos y en algunos casos los trabajadores hacemos de puente entre ellos", explica.

Además de las pautas y actividades que se trasladan vía telefónica a cada usuario, para quienes tienen internet también se utiliza el correo electrónico o el Facebook para proponerles juegos o incluso manualidades.

Ayer mismo la propuesta era aprender a realizar una mascarilla, el objetivo es que sepan ponerlas correctamente y se acostumbren a llevarlas. Puesto que en la llamada de esta semana se comenzará a hablar de cómo será la vuelta a la normalidad después de las semanas de confinamiento.

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