Con motivo de la celebración del Día Nacional de la Enfermedad Celiaca, el 27 de mayo, la web especializa en esta patología Celicidad puso en marcha la primera escuela online sobre celiaquía. En pocos días ya supera los 400 alumnos, lo que para su impulsora, la periodista natural de Cangas del Narcea Lorena Pérez, demuestra la necesidad de información que tiene una persona cuando es diagnosticada como celiaca. Pérez puso en marcha su página web de información sobre esta dolencia hace cinco años y a partir de ahí también empezó a colaborar con el Ayuntamiento cangués en la organización de las Jornadas sin gluten y en la apuesta turística de "Cangas del Narcea, destino sin gluten".
-¿Cómo surge crear una escuela online sobre celiaquía?
-Desde hace tres años teníamos un curso online gratuito donde explicábamos las principales dudas que tenían las personas que nos escribían, pero recibíamos muchas y no éramos capaces de resolverlas todas en tiempo y con la calidad que requería, así que decidimos crear la escuela. Hemos aprovechado el parón del confinamiento para crear la plataforma donde distintos profesionales como doctores, dietistas-nutricionistas y técnicos en seguridad alimentaria van a dejar sus conocimientos.
-¿Sigue habiendo falta de información sobre celiaquía?
-Ese primer curso que teníamos lo hicieron 4.000 personas. Ahora mismo tenemos activo solo uno de los cursos de la escuela, donde se explica la base de la dieta sin gluten y la contaminación cruzada, y en unos días ya tenemos 412 alumnos. Está funcionando fenomenal y se ve la necesidad real que existe de información. Los celiacos, cuando nos diagnostican, nos tenemos que buscar la vida porque en la consulta te dan solo unas pautas sobre cereales con gluten y sin gluten y contaminación cruzada.
-Las jornadas que iban a celebrarse en mayo estaban dedicadas a bulos, que en ocasiones subestiman la enfermedad.
-En muchos casos sí, y nos crea problemas como es ir a un restaurante y que te digan que con quitarle el pan al pincho ya está. Se desconoce que una simple miga ya desencadena la reacción inmunológica del cuerpo. Pero incluso con la familia es difícil que se entiendan todas las medidas de seguridad que toma una persona celiaca, lo que hace que la presión les obligue a saltarse la dieta. A nivel social es donde más daño nos hacen esos mitos. Si la gente supiera que es un problema serio de salud, lo comprenderían.
-¿Cómo es la situación a nivel internacional?
- En Estados Unidos se ha puesto de moda comer sin gluten, la industria alimentaria sin gluten allí es brutal y personas de cierta influencia respaldan que comer sin gluten adelgaza, y no es así. Una persona adelgaza si deja de comer pizza y dulces y empieza a comer lechuga y pescado, por ejemplo, pero si lo sustituyes por pan o bollos sin gluten no vas a adelgazar. Afirmaciones como estas frivolizan la enfermedad. En general, los problemas que hay son prácticamente los mismos que tenemos aquí, aunque hay países que están por detrás que nosotros y que aún están conociendo ahora la enfermedad. Sobre todo hay mucha necesidad de que se sepa más de la enfermedad celiaca a todos los niveles, en el entorno sanitario, a nivel de la sociedad y en la restauración.
-Otro problema que se destacó en una edición anterior de las Jornadas es el infradiagnóstico.
-Tenemos que insistir en que hay muchos celiacos sin diagnosticar. En España se calcula que un 80 u 85% de personas con celiaquía no lo sabe. Necesitamos que atención primaria y todas las especialidades relacionadas con la enfermedad accedan al protocolo de detección precoz de la celiaquía que publicó el Ministerio en 2018 y que muestra que la enfermedad es mucho más que digestiva, que causa infertilidad tanto masculina como femenina, puede provocar problemas de huesos, de hígado o afectaciones neurológicas. No es una intolerancia y, por ello, las consecuencias de ser celiaco y no estar diagnosticado pueden llegar a ser muy graves.
-¿La propuesta turística de Cangas sin gluten está impulsando que aumente la oferta para celiacos?
-Desde que se presentó en Fitur, nos han pedido información de distintos puntos de España, que quieren poner en marcha algo similar. El año pasado sacamos una lista de restaurantes 100% sin gluten con 40 establecimientos, hace unos años eran solo 3. Todavía son pocos, pero la gente empieza a ver que si nos funciona a nosotros también podría hacerlo en otros sitios.
