Puerto de Vega clama por un nuevo dique (la proyectada pero nunca hecha protección al Este) para evitar que las marejadas no pongan en vilo a pescadores y vecinos. El último susto tuvo lugar la madrugada del pasado jueves.
La lancha "Pilar Marina" de Puerto de Vega tiene 11,9 metros de eslora e historia suficiente para contar cómo se sobrevive a las marejadas, en uno de los muelles más polémicos de Asturias por la denunciada falta de protección exterior. Por ello el armador, Eloy Martínez, se llevó “algo más que un susto” cuando la madrugada del jueves recibió el fatal aviso: la fuerza del agua golpeaba el barco contra los muros del muelle. Eran las seis de la madrugada y en el puerto un grupo de personas dio la voz de alarma.
“Al principio no crees lo que te cuentan, porque llevas atracando en el mismo lugar, con marejadas o sin ellas, 20 años”, dice apesadumbrado Martínez. Un grupo de marineros de la villa con el patrón mayor de la cofradía de pescadores Nuestra Señora de La Atalaya, Adolfo García, a la cabeza, salvaron la histórica embarcación gracias a una arriesgada hazaña. Lo consiguieron no sin esfuerzo y peligro. Utilizaron un bote pequeño y manejable para acceder al barco que se iba a pique. Una vez dentro, atracaron en un lugar más protegido del muelle. Ahora, “Pilar Marina” tiene múltiples daños. Casi todas las bitas están rotas, los destrozos son visibles en la estructura principal y tendrá que pasar por una concienzuda revisión del casco para volver a la mar. “Directo al astillero cuando se pueda”, resume Martínez.
Como todas las embarcaciones tienen seguro, pero este parón en plena costera del percebe no deja de generar preocupación en los armadores propietarios del barco, en un momento de incertidumbre por el comportamiento de la demanda, muy condicionada a la crisis sanitaria. ¿En qué se traduce todo esto? “En dinero, en economía, en que pierdes dinero y en que dejas de ingresar”, sostiene Martínez. Con toda probabilidad la embarcación no estará lista para faenar en varias semanas.
Desde la cofradía apelan al “sentido común”. El patrón mayor de Puerto de Vega considera que los marineros no tienen que hacer guardias durante toda la noche en días de marejada cuando los barcos tendrían que estar atracados “en puerto seguro”.
En este villa naviega esperan por el histórico dique Este desde hace décadas. “Necesitamos ya una solución, los hechos hablan por sí solos", dice García, especialmente indignado por la falta de interés por este millonario proyecto. El alcalde de Navia, el socialista Ignacio García Palacios, se reunió a finales de 2019 con el entonces consejero de Infraestructuras y hoy vicepresidente, Juan Cofiño, para reclamar una pronta actuación “por seguridad”. Entonces, el regidor naviego defendió hacer el dique según el proyecto realizado hace años o estudiar otra alternativa no tan costosa. Desde entonces, no ha habido avances.
