Las tallas de la capilla del Carmen de Cerredo, situada en el complejo del Centro de Interpretación de las Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias, y popularmente conocida como Casa Florencio, ya están listas para regresar a casa después de haberse sometido a un tratamiento de conservación en el Museo Arqueológico de Asturias. No obstante, su vuelta se hará esperar, puesto que la capilla, pendiente de su propia restauración, no está en la actualidad en condiciones para volver a albergarlas.
Las tallas de la Virgen del Carmen, Santa Bárbara, Santa Ana y una de las más especiales, la Virgen con el Niño, que algunos relacionan con la Virgen de Montserrat –conocida popularmente como “La Moreneta”– debido a su color oscuro y que está datada entre los siglos XIII y XIV, forman parte junto a algunas peanas y atriles de las piezas que se trasladaron al Museo Arqueológico para recibir tratamiento contra la carcoma y frenar su deterioro.
Las piezas, hechas en madera, están fechadas entre los siglos XIII y XV y ya hace al menos seis años que habían sido llevadas por la Consejería de Cultura para realizar los trabajos de conservación en ellas. Todas se encontraban dentro de la capilla del Carmen, pero el mal estado de la construcción hizo que fueran retiradas y almacenadas en una sala del Ayuntamiento. El estado de conservación de las tallas entonces no era bueno y el Ayuntamiento decidió cederlas al Principado para que realizara las actuaciones necesarias para recuperarlas, ya que son piezas muy queridas en el municipio.
No obstante, desde el Ayuntamiento se había manifestado en las últimas reuniones con el director general de Patrimonio Cultural la intención de que las tallas, una vez tratadas, regresasen al municipio. Algo para lo que ya tienen actualmente autorización, aunque la vuelta a casa dependerá de que se pueda preparar un espacio adecuado para su conservación.
Lo idóneo para el Ayuntamiento es que las piezas pudiesen volver a su lugar de origen en la capilla, pero para ello antes el templo debe someterse a una restauración, cuestión en la que están trabajando para conseguirla. Mientras tanto, también se baraja la posibilidad de habilitar vitrinas especiales para ubicarlas dentro de las instalaciones del recientemente abierto Centro de Interpretación de las Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias.
“Esperamos articular las mejoras necesarias para que las tallas a su regreso puedan ser ubicadas con todas las medidas de conservación y cuidado que merecen, eso pasa por una próxima rehabilitación de la capilla del Carmen o la colocación de unos expositores en el mismo Centro de Interpretación, si fuese necesario”, explica el alcalde de Degaña, Óscar Ancares.
El regidor considera que la recuperación de las tallas puede suponer una importante atracción turística por el valor cultural y la antigüedad que tienen las imágenes, pero lo que más valora es la repercusión social que tendrá para el concejo. “Las tallas son muy queridas en el municipio, forman parte de nuestras tradiciones y costumbres y tienen mucho arraigo en la población”, explica. En este sentido, agradece que tanto la Consejería de Cultura como el Museo Arqueológico de Asturias hayan compartido la importancia que para el concejo tenía la recuperación de las piezas.
Una vez tratadas frente al deterioro las diferentes tallas de la capilla del Carmen, el objetivo está puesto en conseguir la reforma del templo que forma parte de la conocida como Casa Florencio, un conjunto turístico para Cerredo, puesto que es donde se encuentra el Centro de Interpretación de las Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias, en cuyo interior se ubica una sala de exposiciones y la Oficina de Turismo, y que se completa con un hórreo.
Por ahora, técnicos de la Consejería de Cultura han visitado la capilla para realizar un informe sobre la situación del edificio y valorar las actuaciones que requiere para su restauración. Asimismo, en su interior, el templo cuenta con un retablo barroco del siglo XVIII que se está deteriorando debido a la humedad que se filtra en la edificación, por lo que tras la rehabilitación del edificio también se buscaría poder abordar la recuperación del retablo que no solo es especial por ser de estilo barroco, sino que se añade que incorpora simbología asturiana en sus decoraciones.
De nuevo desde el Ayuntamiento aseguran que más allá de recuperar la capilla con un objetivo turístico está la importancia que tiene para los vecinos ver su patrimonio en buen estado. "Para el pueblo es importante, la consideran como algo suyo y la quieren ver restaurada y con las tallas de vuelta en su interior", asegura el Alcalde.
