Plantaciones de frutales, crear alguna ruta turística, restaurar una bocamina para usarla como cueva de maduración de quesos o vinos y tapar las balsas que han quedado tras la explotación minera a cielo abierto en la zona de Tormaleo (Ibias) son algunas de las propuestas que tienen en mente los vecinos de la zona para restaurar sus montes. Unas ideas que tendrán que enviar en los próximos 10 días por escrito a la Dirección General de Energía, Minería y Reactivación, para que a través de la empresa Tragsa se estudie su viabilidad a fin de que puedan formar parte del proyecto de restauración de la antigua mina, que se pretende poner en marcha este mismo año.

Para ello, la dirección general incautará los avales depositados por la empresa minera para garantizar una restauración de la zona que no se llevó a cabo y que, por lo tanto, asume la administración de forma subsidiaria. Serán unos 5,5 millones de euros que tanto administración como vecinos ven insuficiente para rehabilitar las casi 200 hectáreas de monte afectadas.

“La cuantía, aunque parezca mucha, es insuficiente, por eso estamos trabajando con el Instituto de Transición Justa para buscar fondos adicionales”, apuntó la directora general, Belarmina Díaz, que ayer visitó la zona y escuchó las peticiones vecinales. El objetivo que se marcan es poder arañar financiación del Plan de restauración ambiental para explotaciones mineras en cierre o abandonadas y terrenos deteriorados que se ha incluido en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que se financiará con el Instrumento Europeo de Recuperación.

Belarmina Díaz también visitó, junto al alcalde de Tineo, José Ramón Feito, la central térmica del Narcea, en Soto de la Barca, actualmente cerrada. No quiso apuntar ninguna de las alternativas que se barajan para sustituir la actividad económica que generaba la central en la zona, pero insistió en que se estaba trabajando en diferentes estudios e iniciativas.

La propuesta que se había trasladado desde Naturgy consistía en la construcción de dos parques eólicos y la recuperación del río Narcea, a su paso por la ubicación de la central, para fines recreativos. Dos actividades que el regidor tinetense considera insuficientes. “Queremos que aporte algo más para reactivar el Suroccidente, siempre dijimos que no queríamos que Naturgy se fuera de aquí de rositas”, aseguró.