El Ayuntamiento de Valdés ampliará este verano dos horas el actual horario de visitas del bosque-jardín de Luarca, con el objetivo de estar más disponible para el potencial visitante y colarse entre los recursos turísticos de más interés de Asturias. De esta forma, el nuevo horario será de nueve de la mañana a nueve de la noche, no de 11:30 a 20:30 horas, como hasta ahora.

El concejal de Turismo, Ismael González, aclaró que de 9:00 a 11:30 horas no habrá personal en la taquilla, pero será posible acceder al conjunto con la tarjeta de abonados o con entradas adquiridas a través de internet gracias al sistema de control de visitas que ya están funcionando.

Idéntica situación se vivirá a última hora de la tarde, cuando se cierre el servicio de compra de entrada directo y con personal. De este modo, de 19: 30 a 21:00 horas solo los abonados y aquellos que tengan el ticket con código QR que se puede comprar por internet podrán entrar en el recinto. El gobierno local busca con este paso sumar turistas y colocar el bosque-jardín de Luarca entre los recursos turísticos más visitados en Asturias en verano.

Recientemente, el Ayuntamiento selló un acuerdo con la propiedad para comprar la mitad del conjunto botánico libre de cargas por 260.000 euros, de esta parcela de nueve hectáreas que atesora numerosas y singulares especies y cuenta con un diseño paisajístico único.

El matrimonio propietario, los marqueses de San Nicolás de Nora, están “satisfechos” con este acuerdo que hace copropietario al Ayuntamiento y con la rápida recuperación del conjunto dirigida por la administración local. La esposa del fundador, Rosa María Pardo de Unceta, declaró a este diario que están, además, “impresionados” con la cantidad de visitas que recibe el bosque-jardín y con la apuesta “valiente” del gobierno municipal al alquiler primero la parcela, comprar más tarde la mitad y seguir negociando la otra mitad una vez que está libre de cargas.

“Como se sabe, nosotros no podíamos hacer el mantenimiento y nos alegra mucho que este jardín en el que José Rivera Larraya puso tanto empeño, por ser él una persona tan especial, tenga futuro”, dijo Pardo a este diario. La propietaria también detalló que en su día el matrimonio se puso en contacto con el Principado pasa salvar los jardines, “pero no se llegó a ningún acuerdo”.

El gobierno municipal espera cerrar la adquisición de la otra mitad antes de que acabe el año. En ese tiempo el propietario tendría que liberarse de las cargas que pesan sobre ella. Una vez que la propiedad reduzca a cero las deudas, el Ayuntamiento dispondrá de un año, como límite, pasa sellar el acuerdo de compraventa por 250.000 euros. El alcalde, Óscar Pérez, está convencido de que el conjunto debe ser municipal en su integridad para sacarle el mayor rendimiento. El regidor también cree que, por las características propias del conjunto (“único en el Norte de España por su extensión, vegetación y por mirar al mar”), el bosque-jardín puede ser uno de los grandes atractivos de la cornisa cantábrica.

En próximas fechas, el Ayuntamiento instalará una placa en recuerdo al matrimonio formado por José Rivera Larraya y Rosa María Pardo de Unceta. Con él se busca recordar los inicios del bosque-jardín y el tesón del matrimonio por mantener el conjunto durante varias décadas.