El jardín de la Fonte Baxa de Luarca consiguió impresionar al conocido como “mesías de las plantas”, el gijonés Carlos Magdalena, que ayer visitó por primera vez el espacio natural luarqués. Magdalena trabaja como botánico conservador en el Real Jardín Botánico de Kew, en Londres, y desde su amplia experiencia en el sector reconoció que la Fonte Baxa tiene potencial e incluso no dudó en asegurar que “podría ser un jardín referente en España”.
El experto acudió a Luarca acompañado por su familia y su amigo Miguel Llana-Valdés, que también tiene un importante jardín privado en Salas. Allí fueron recibidos por los concejales Ismael González y Jesús Fernández, los guías José Manuel Alba y Nike García, y Beltrán Pedregal, hijo de Rosa María Pardo, quien junto a su marido José Rivera crearon el jardín de la Fonte Baxa a los pies de su casa, donde ahora Pedregal ha abierto una tienda con productos locales y plantas. Todos ellos recorrieron el jardín durante el mediodía interesándose por los consejos e información que les iba dando el botánico. Entre ellos, cómo reproducir un helecho gigante de Tasmania o cómo intentar salvar algunas de las especies que muestran signos de debilidad en el jardín después de pasar varios años de abandono hasta que el Ayuntamiento decidió hacerse cargo de él y empezó a recuperarlo el año pasado, primero alquilando el terreno a los dueños y recientemente con la compra de la mitad de la parcela.
Las clases magistrales por parte de Magdalena complementaron la visita guiada e hicieron que ambas partes pudieran hacer descubrimientos a cada paso. De hecho, el botánico reconoció que no imaginaba encontrase con una jardín tan grande, ni siquiera con la mitad de lo que tenía ante sus ojos. “Me lo imaginaba 10 veces más pequeño, descubrí un Parque Jurásico aquí”, señaló.
Fue sincero al asegurar que al jardín aún le faltan unos años de mantenimiento para alcanzar el esplendor que esconde e incluso dejó algunos consejos a sus anfitriones: “Creo que necesita un área de jardinería intensiva, donde se trabaje más al detalle y combinarla con otras áreas más extensivas, naturalizadas, otras que sean de bioma, otras pueden ser biotopos”. Pero sin duda en lo que insistió es que el trabajo debería continuar para conseguir pulir el diamante en bruto que es ahora el jardín y puso el acento en el lugar privilegiado en el que se encuentra, algo que insistió es “único y no se puede comprar”.
“Apreciar la naturaleza”
“Es un jardín con cuestas, acantilados al lado, con vistas al mar, es un sitio impresionante, y eso no se tiene tan fácil, son elementos incomprables y hay que sacarle todo el jugo”, insistió.
Carlos Magdalena también alabó la recuperación de la Fonte Baxa por ser uno de los pocos jardines históricos que hay en Asturias, señalando que estos espacios son una importante alternativa de ocio, que además sirve para promocionar la jardinería y la conservación de la flora entre la población, especialmente entre los más pequeños.
“Con la pandemia, lo más seguro para salir es ir a un jardín. Londres se salvó porque tiene la mayor densidad de parques de toda Europa y estábamos todos allí. En esta situación el mundo se dio cuenta de lo importante que es tener un espacio saludable y empezamos a apreciar la naturaleza”, reflexiona. En este sentido, su recomendación es salir a sentarse en el bosque, sin hacer nada, solo contemplar, para poder empezar a aprender más de la naturaleza. “Empiezas a preguntarte por el pájaro que canta y de ahí comienzas a tirar de la manta, además contemplar es lo mejor que puedes hacer para tu salud mental y no hay sitio mejor que un jardín para eso”, reconoce.
Tanto para el Ayuntamiento como para el guía José Manuel Alba, que se encargó del cuidado del jardín durante años, recibir en la Fonte Baxa a Carlos Magdalena fue todo un honor, y llegaron a la cita con ganas de recibir consejos y aprender de un número uno de la botánica. “Queremos aprovechar todo su conocimiento y los consejos que nos pueda dar”, apuntó el edil Ismael González.
