La directiva del Club Náutico de Figueras se reunió hace unos días con los responsables del Servicio de Puertos del Principado para dar forma al proyecto que dará protección al puerto deportivo figuerense y posibilitará su ansiada ampliación. El planteamiento les gusta, pero no la falta de concreción sobre su desarrollo. “Un proyecto sin plazo de ejecución y sin partida presupuestaria es como si no existiera”, lamenta el presidente, José María Alonso, que lleva años denunciado la falta de apoyo que recibe la infraestructura, tanto por parte del Principado como del Consistorio castropolense.
Los planes del Gobierno regional pasan por ejecutar una obra que lleva años anunciada: convertir el dique flotante que cierra el puerto deportivo en uno permanente que ofrezca protección completa al muelle y permita reorganizar la dársena ganando plazas de atraque en el muelle viejo (entre el actual puerto deportivo y el astillero Gondán). “El proyecto está bien, en la reunión con la jefa del Servicio de Puertos nos plantearon varias propuestas y creo que coincidimos, pero, cuando preguntamos si podría haber algo en 2022 nos dijeron que no dependía de ellos”, lamenta Alonso.
El equipo que dirige está al límite, “cansado y desilusionado” por la falta de respaldo y por la poca inversión que el puerto de Figueras recibe, pese a tener completas sus aproximadamente 170 puntos de amarre. Tienen una asamblea el 20 de este mes, donde esperan encontrar relevo. De lo contrario, están dispuestos a abandonar. “Queremos dejarlo porque no tenemos apoyo, ni de los socios ni de la Administración”, señala Alonso.
El responsable del colectivo defiende el buen funcionamiento del puerto de Figueras. De hecho, cuentan con más de cuarenta lanchas en lista de espera con lo que las plazas que resultarán de la ampliación se cubrirían prácticamente al instante. Lamenta Alonso que no haya inversión en un puerto que funciona bien y que necesita obras básicas como un dragado. De hecho, asegura que prácticamente la única inversión regional que reciben es la reparación de los cadenones del dique exterior flotante que se rompen de manera constante por el impacto del mar. Alonso no solo es crítico con el Principado, sino también con el Ayuntamiento de Castropol. Hace dos años que se presentaron al actual gobierno y aún no han mantenido reunión alguna con ellos. “No se apoya al puerto. No recibimos ni un euro desde el Consistorio”, denuncia, pese a la repercusión económica de la instalación en el concejo.
