Un premio inesperado y una gran sorpresa, aunque llevaban diez años con la candidatura. Así han vivido el nombramiento de Pueblo Ejemplar en Santa María del Puerto. En esta aldea, enclavada en el parque natural de Somiedo, viven una decena de familias en invierno, "aunque en verano se llena de los que en su día se marcharon". Hoy todos han compartido la celebración. "No nos ha dado tiempo a preparar nada", afirmaba minutos después de conocer la noticia María Beatriz Hino, alcaldesa de barrio desde hace un año: "Cuando me lo dijeron esta mañana pensé que era una broma".
En Santa María del Puerto la mayor parte de los habitantes viven del ganado. Hay 14 ganaderías y unas 900 cabezas de asturiana de los valles. "Queremos reivindicar que la trashumancia sigue existiendo aunque adaptada al siglo XXI. El ganado está aquí hasta octubre y durante el invierno se baja a los valles", explicaba en plena celebración Nicolás Álvarez, agente de desarrollo rural del Ayuntamiento de Somiedo.
"Estamos encantados con el nombramiento de Pueblo Ejemplar. El trabajo de los ganaderos es muy complicado", ha asegurado Sari Lorences, encantada con el galardón. "Vivo en Oviedo y vengo aquí a pasar el verano. Este año me iré cuando vea a los Reyes". Marta Lorences tiene sesenta cabezas de ganado y vive en la pequeña localidad somedana con su marido y su hijo pequeño. "El invierno es lo mas complicado, tienes que salir de casa apartando la nieve", explica. "El dinero del premio debería servir para hacer mejoras en el pueblo. Aquí hay muy mala cobertura de móvil, por ejemplo".
José Riesgo tiene 80 años y con el galardón de hoy hace realidad un sueño que acariciaba hace años. "Somos un pueblo ejemplar y gente ejemplar. Durante muchos años nos tenían discriminados por nuestro modo de vida", ha reivindicado. Riesgo lleva toda su vida trabajando con el ganado. "Desde que empecé a caminar hasta que me jubilé me dedique a arrear el ganado. Tardábamos dos días en llegar a Belmonte y Salas. Ahora van como señores en camión. Yo soy vaqueiro de nacionalidad. Nací vaqueiro y moriré vaqueiro" .
Azucena Lorences es la principal impulsora de la candidatura: "La noticia me pillo conduciendo, es un orgullo, somos un ejemplo de cómo se vive en un pueblo de alta montaña. Hacemos extensivo el premio a todas las ganaderías y familias de alta montaña de Asturias. La vida en invierno es dura y hay q trabajar mucho pero se puede emprender".
Una terna de 27 candidaturas
Competían 27 candidaturas, pero la gloria solo se la iba a lleva uno. Y esa gloria, la que implica convertirse en el Pueblo Ejemplar de Asturias 2021, ha recaído en la comunidad vaqueira de Santa María del Puerto. Esta localidad de Somiedo le da el relevo a Somao (Pravia), Pueblo Ejemplar 2020. Fue Somao el último enclave asturiano que se mostró a toda España gracias al recorrido que hizo por sus caminos la familia real española, en la mejor campaña de promoción que ningún pueblo puede llegar a tener. Antes habían sido también "ejemplares" Asiegu (Cabrales), Mual (Cangas del Narcea), Poreñu (Villaviciosa), Comarca de Los Oscos, Colombres (Ribadedeva), Boal, Teverga, Bueño (Ribera de Arriba), San Tirso de Abres... y otros 20 localidades desde que en 1990 se entregó a San Esteban de Cuñaba (Peñamellera Baja).
En este caso, de Santa María del Puerto (segundo pueblo somedado que logra el galardón tras Villar de Vildas) se ha valorado la historia de un pueblo, en el límite con León, a 1.486 metros de altitud, que está muy ligado a los vaqueiros de alzada, que en el siglo XV llevaron a cabo la Revolución de los Cercados para consolidarse como pueblo en esta zona donde practicaban la trashumancia. Desde que Somiedo fue declarado Parque Natural, El Puerto vivió un impulso con el arreglo continuado del pueblo. La tradición vaqueira sigue estando muy presente, con varias fiestas y ferias tradicionales entre ellos, celebrando cada año el Alcuentro Vaqueiro.
En su acta del premio, el jurado valoró que "Santa María del Puerto encarna el modelo de pueblo de montaña que ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos, incluso abanderando uno de los rasgos identitarios de la cultura de los vaqueiros de alzada, como es la trashumancia. Lo que ha favorecido la creación y mantenimiento del paisaje, una actividad ganadera importante y la permanencia de parejas jóvenes, asegurando de ese modo el relevo generacional de esta comunidad".
A los otros 26 aspirantes -Ribadesella; Trapa, La Vega y El Carme (Langreo); Santurio (Gijón); la Cofradía de Pescadores de Santa Ana (Llanes); la biblioteca de Coaña; Lugones (Siero); la Comarca del río Sella; la Comunidad vecinal de San Cucufate (Llanera); Peḷḷuno (Aller); Suarías (Peñamellera Baja); Arroes (Villaviciosa); Ríu Fontoria (Piloña); la Comunidad cultural, deportiva y paisajista de Navia; Coviella (Cangas de Onís); Posada (Llanes); Pesoz; Villoria (Laviana); Muriellos (Riosa); Llaviana (Gozón); Caso; Salas; Fitoria-Villamejil (Oviedo); Valdesoto (Siero); el Valle del Samuño (Langreo); Banduxu (Proaza) y Cadavéu, Vil.lamouros y Ribón (Valdés)- les queda aplicar paciencia y volver a intentarlo en nuevas ocasiones.
En esta ocasión han compuesto el jurado Cristina Álvarez Mendo, Amada Álvarez Pico, Lorenzo Arias Páramo, María Cardín Blanco, Yolanda Cerra Bada, Rosa Fernández Rubio, Begoña Fernández-Costales, Pablo García Esteban, Adolfo García Martínez, Francisco González Orejas, Juaco López Álvarez, Ramón Rodríguez Álvarez, Jorge Suárez Díaz, José Tuñón Huerta, Graciela Valle Fernández, y Consuelo Veiga García. Actuando como presidente del jurado Francisco Rodríguez García y con Fernando Delgado Álvarez como secretario.
