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Un tercio de las construcciones del Chao Samartín ya están consolidadas

La actuación, que permitirá abrir al público el yacimiento de la Edad del Bronce con un recorrido divulgativo, concluirá este otoño

En detalle, los trabajos de consolidación.

Un tercio de las construcciones del castro Chao Samartín de Grandas de Salime, de la Edad del Bronce, ya están debidamente consolidadas y se confía en que la esperada e histórica actuación iniciada el pasado marzo concluya en otoño. La arquitecta y directora del proyecto, Silvia Ollacarizqueta, aseguró ayer a este diario que los trabajos han sido hasta la fecha “tediosos” por el escaso mantenimiento y la falta de documentación sobre lo hecho tiempo atrás en el lugar.

La actuación para consolidar el castro Chao Samartín, la primera operación para abrir definitivamente el yacimiento al público de forma didáctica y contener su deterioro, avanza y tras el verano, se esperan ver los resultados de unas tareas en las que han trabajado en los últimos seis meses, a diario, entre 3 y 17 personas.

Vista del poblado tomada ayer, con grava en el firme y protecciones en los techos. | R. A. M. S.

Como novedad técnica, Ollacarizqueta señaló que, finalmente, para proteger las construcciones en su máxima altura y a modo de techo se optó por “coronaciones con piedra de la zona”. “Se ensayaron varias soluciones poco invasivas y esta es la que más se integra”, concretó. La piedra se extrae de una cantera próxima y para su acople se utiliza mortero de cal.

Sobre el terreno se pueden ver suelos con grava, como prevé el proyecto, y también una imagen diferente de algunas construcciones cuya consolidación ha finalizado. “Las necesidades de cada cabaña eran diferentes, por eso tardamos más; cada elemento tiene su tarea”, subrayó la directora de obra.

Un especialista, trabajando en el castro.

En todo este tiempo se logró limpiar la vegetación en el conjunto y documentar el estado de las construcciones y el impacto sufrido por actuaciones pasadas o la propia meteorología. Este último trámite “no llevó mucho tiempo porque no había nada documentado y empezamos caso de cero”. El equipo se encontró, además, con muchos problemas estructurales, grietas, oquedades e, incluso, un recalque de ladrillo que se eliminó para hacerlo de piedra.

En dos semanas se espera que el ritmo avance decididamente para poder cumplir con el plazo de ejecución. En todo caso, “es precipitado decir ahora que acabaremos en octubre, como estaba previsto”, destacó la arquitecta quien aseguró que quizás tengan que pedir una prórroga. “Por ejemplo, esperamos por materiales fábrica y los suministros en estas fechas van mas lento”, dijo.

Comisión de seguimiento

Las obras de emergencia del yacimiento están supervisadas por el Principado. Ayer, el director general de Cultura y Patrimonio, Pablo León, presidió la reunión de la comisión de seguimiento. A preguntas de este diario, la Consejería de Cultura rechazó hacer declaraciones sobre lo hecho, ya que “solo informa el Ayuntamiento como propietario de la obra”.

Trabajando en el Chao

La consolidación del castro grandalés, como otras actuaciones en patrimonio protegido, están vigiladas por el Principado, que debe constatar que lo proyectado se cumple. El castro del Chao Samartín es, a este respecto, especial porque sobre el proyecto original, y ya adjudicado, se deben hacer varios cambios propuestos por el Principado con el consentimiento del Ayuntamiento grandalés. Estas modificaciones se incluyeron tras la larga polémica que levantó el proyecto. Algunos especialistas se mostraron en contra del planteamiento de la ahora directora de la obra y el arquitecto Juan Represa por proponer acciones y materiales que no creían respetuosos con la esencia del castro.

El Alcalde de Grandas, Eustaquio Revilla, por su parte, manifestó su satisfacción con lo hecho y dijo que el yacimiento afronta un cambio “que es una maravilla”.

Tras la actuación habrá recorridos específicos de visita y en todo el conjunto varios carteles identificarán las zonas de interés. Además, se dispondrá de mapas para facilitar la divulgación.

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