Tan reducido en aforo como especial y agradecido. Así fue ayer el acto de celebración de la festividad de la patrona de la Guardia Civil Virgen de Nuestra Señora del Pilar de la compañía de Luarca. Tuvo lugar en la Casa de Cultura luarquesa tras la tradicional misa y sirvió para recordar, ahora más que nunca tras haber pasado lo peor de la pandemia del coronavirus, que la visita de la Guardia Civil a cada lugar de Asturias debe verse y sentirse como “un pronóstico feliz”. Fue el capitán de la Guardia Civil y jefe de la Comandancia de Luarca, Carlos Bello, quien recordó esta idea que recoge la cartilla del Guardia Civil en su articulado.

Con poco público, el acto empezó pasada la una y media de la tarde con la imposición de las condecoraciones. Este año recibieron la Cruz del Mérito de la Guardia Civil con Distintivo Blanco el cabo primero destinado en el puesto de Navia Emilio Antonio Ocampo García y el guardia civil destinado en el puesto de Luarca Rubén Marcos Montaña. El primero, recogió el reconocimiento de manos del alcalde de Valdés, Óscar Pérez, y el segundo, del capitán de la Comandancia de Luarca, Carlos Bello.

Tras la breve entrega de las condecoraciones impuestas “por diferentes disposiciones de los Ministerios de Defensa e Interior y en atención a méritos y circunstancia”, el capitán se dirigió a los presentes con un sentido discurso de agradecimiento. Lo peor de la pandemia ha pasado, pero el acto de ayer nada tuvo que ver con el tradicional de años anteriores a la crisis sanitaria, ya que no pudo haber familiares y allegados. Carlos Bello dio protagonismo a todas las personas que no pudieron estar en la cita por imperativo y prudencia y son especiales para el cuerpo. Primero, agradeció el “esfuerzo” de “todas las unidades” en un año complicado por su apoyo, fiel cumplimiento de obligaciones y especial atención a los colectivos vulnerables, entre ellos “las personas mayores” que habitan los pueblos, quienes deben seguir observando la llegada de la Guardia Civil como “un pronóstico feliz”. Bello también destacó la colaboración con otros cuerpos de seguridad, protección y cuidados del municipio, la autonomía y el Estado. Mencionó al Cuerpo Nacional de Policía, la Policía local, Protección Civil, Cruz Roja, Salvamento Marítimo, Vigilancia Pesquera, Bomberos de Asturias y Mantenimiento de Carreteras, entre otros.

También aplaudió la colaboración, intensa y diaria, con el Área sanitaria I durante los últimos meses de pandemia y tuvo un recuerdos especial para su gerente, Bárbara González, por el contacto diario con la Guardia Civil.

Por la izquierda, el capitán de la Comandancia de Luarca, Carlos Bello; el alcalde, Óscar Pérez, y los agentes que recibieron las condecoraciones, Emilio Antonio Ocampo y Rubén Marcos, ayer, en la Casa de Cultura. | A. M. S.

Bello no concluyó su discurso sin antes hacer mención al trabajo y a la atención que tuvieron con la Guardia Civil, cuando apenas había mascarillas y gel desinfectante, las empresas Bazar Quico y Macysa, la asociación ”Sardina Carnavelera” de Luarca y el fundador de la Coordinadora para el Estudio de las Especias Marina y vecino luarqués, Luis Laria. “Recordamos además a nuestras familias, siempre presentes, a los agentes retirados y en la reserva y los compañeros fallecidos en el último año: Higinio Lastra, Manuel Miguens y Luis Manuel Orta”, dijo.

El capitán ofreció datos sobre el hacer y resultados de las unidades adscritas a la Comandancia. En lo que va de año, se produjeron 200 detenciones, 42 de ellas relacionadas con el patrimonio. Entre otros casos, se logró investigar y detener a una banda por robos en el interior de vehículos que llevaban a cabo en Asturias, Galicia y País Vasco y a integrantes de otra, conocida como “banda del Seat León”, que delinquían en locales. Este año también se registraron diez detenciones por tráfico de drogas y por delitos relacionados con el medio ambiente y el Seprona investigó a nueve personas.

Carlos Bello recordó el hacer, menos visible, pero por ello menos importante, de los agentes adscritos al departamento de Tráfico. El alcalde, Óscar Pérez, fue el encargo de cerrar el acto al grito de “¡Viva España!”.