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El Hospital de Jarrio estrena mobiliario y aparatos tras 900.000 euros de inversión

“Se hizo uno de los desembolsos más potentes de la historia del área sanitaria, para beneficio de pacientes y profesionales”, subraya la gerente

Quirófano. Jesús Á. Vicente, con la torre de anestesia. | T. C.

Los pacientes de Jarrio tienen desde hace unos días una estancia más confortable en el centro hospitalario coañés. Y es que el equipamiento ha renovado la totalidad de sus camas y colchones, incorporando 130 eléctricas articuladas que mejoran no sólo la comodidad, sino también la seguridad de sus usuarios. Es una de las últimas compras realizadas este 2021, pero no la única. De hecho, Jarrio ha afrontado este año “una de las inversiones más potentes” de su historia en mobiliario y aparataje, tanto para el hospital de cabecera del Noroccidente como para los centros de salud adscritos.

movilidad. María Jesús Pérez, con las nuevas sillas. | T. C.

Así lo expone la gerente de Jarrio, Bárbara González de Cangas, quien indica que el desembolso realizado por la Consejería de Salud en esta materia supera los 900.000 euros. 650.000 euros se han destinado a la compra de elementos de mobiliario y 260.000 a nuevos aparatos para diferentes servicios del Área Sanitaria I. Prácticamente, la totalidad de la inversión se enmarca en el denominado Marco Integral de Actuaciones para el Área Sanitaria I, que entró en vigor este año.

La gerente explica que había mucha necesidad de cambiar algunos aparatos por su obsolescencia y, en otros casos, se necesitaban nuevas herramientas. También hacía falta renovar buena parte del mobiliario, que, en muchos casos, databa de la apertura del centro, en 1989. Es el caso de los muebles del salón de actos, al que se dará un “lavado de cara total”. “Redunda todo en beneficio del paciente, primero, y, después, del profesional que lo atiende”, subraya González de Cangas.

laboratorio. Una técnica maneja el microtomo. | T. C.

LA NUEVA ESPAÑA ha hecho un recorrido por el hospital para conocer algunos de los nuevos materiales, cuyo detalle completo, por su extensión, sería complicado de exponer. El supervisor de Recursos Materiales y del área de Hospitalización, Antonio Bazán, ejerce de guía y hace una primera parada en Pediatría para mostrar las nuevas camas, que han costado 250.000 euros. “Tienen muchas ventajas, cuentan con sistemas más modernos y adaptados, son más ligeras, sus piezas son fáciles de extraer y permiten funciones que no permitían las otras”, expone. Destaca algunas opciones, como la posibilidad de bajar la cama casi al nivel del suelo. Además del mayor confort, ofrecen a los profesionales un “mejor acceso para el cuidado y prevención de heridas y para la exploración del paciente”. Además, tienen un sistema de luz nocturna inteligente que aumenta la seguridad. En las habitaciones también se renovarán los cabeceros, los armarios y las mesitas. Asimismo, está pendiente de llegar una nueva central de llamadas de los timbres de hospitalización.

La siguiente parada de la ruta está en los quirófanos, donde el jefe del servicio de Anestesia, Jesús Ángel Vicente, explica las virtudes de la moderna torre de anestesia adquirida. “Tenemos tres torres, dos de ellas son de los años 2017 y 2018, así que están bien, pero la tercera era del año 2000 y se había quedado obsoleta. Gracias a esta incorporación podemos decir que los quirófanos, desde el punto de vista de la anestesia, están completos”, subraya. Destaca la funcionalidad de la nueva torre, un aparato “avanzado que permite hacer cualquier cirugía en un paciente adulto”. Además, están pendientes de conectar la torre al Selene, la plataforma informática que usan los hospitales asturianos, lo que les permitirá volcar todos los datos del paciente y prescindir del papel.

Descanso. Antonio Bazán muestra una habitación con dos de las nuevas camas. | T. Cascudo

Desde los quirófanos al laboratorio de Anatomía Patológica, donde se ha adquirido un moderno microtomo, cortador de tejidos que permite a los técnicos trabajar con más precisión y agilidad para ofrecer al patólogo “un buen corte” con el que poder afinar su diagnóstico.

La última parada de este recorrido está en uno de los pasillos del centro, donde la supervisora de celadores, María Jesús Pérez, muestra las quince sillas de ruedas adquiridas. “Los compañeros dicen que son más fáciles de maniobrar y están contentos con ellas”, afirma. Por citar algunas otras compras, también se ha adquirido un vídeocistoscopio para Urología, un motor de artroscopia para Traumatología, así como desfibriladores, nuevos sistemas para la medición del índice tobillo-brazo, eco doppler o equipos de crioterapia para Atención Primaria, donde también se están estrenando uniformes nuevos para el personal de guardia. La lista de nuevos materiales es larga y se espera que crezca en 2022 y 2023, cuando está prevista la llegada de un nuevo escáner al hospital.

La gerencia confía en contratar en 2022 el geriatra, vacante desde hace casi dos años

Pese a los contratiempos de la pandemia, se podría decir que 2021 ha sido un buen año para Jarrio. Así lo percibe la gerente, Bárbara González de Cangas. “Estamos en un momento muy tranquilo en el hospital, tanto a nivel de contrataciones como de actividad, con una recuperación muy importante de las consultas y de la actividad quirúrgica”, dice. Este año se han incorporado un buen puñado de nuevos profesionales, lo que ha permitido contar con especialistas en la práctica totalidad de las carteras. Queda por cubrir la vacante de geriatría, vacía desde hace casi dos años. Sin embargo, González de Cangas desvela que, si nada se tuerce, se podría contratar a lo largo de 2022”. “Una vez incorporemos el geriatra, habrá especialistas en todos los servicios y en las especialidades unipersonales, que a veces se critican, la actividad asistencial no puede ir a mejor ritmo. Ejemplo de ello es Cardiología, con una de las demoras medias mejores de la historia del área”, indica la gerente. La gerente alaba el esfuerzo realizado en pandemia por los profesionales de Atención Primaria, “los más castigados”, y hace especial reconocimiento a la plantilla de enfermería: “Me quito el sombrero con ellos, han estado vacunando y haciendo PCR mañana tarde y noche en cualquier lugar y momento. No se puede hacer más por una área sanitaria y sus usuarios”.

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