El geólogo valdesano Carlos López alerta sobre la existencia de, al menos, tres puntos con riesgo de desprendimientos en el tramo de la N-634 que discurre entre Vistalegre y Luarca y que constituye el principal acceso a la capital valdesana desde Galicia. Así se lo ha trasladado al Consistorio valdesano para que se informe a la administración competente, en este caso a la Delegación del Gobierno, de cara a que “se acometan las actuaciones necesarias que garanticen la seguridad de los usuarios”.
No es la primera vez que López, que además de ser experto en estabilidad de taludes es portavoz del PP de Valdés, alerta de los riesgos de esta vía. De hecho, a finales de noviembre, advirtió en las redes sociales de un “riesgo evidente de caída súbita de rocas” en la zona, lo que ocurrió a principios de diciembre, sin que hubiera que lamentar daños personales. Se desprendieron a la carretera entre cuatro y cinco toneladas de pizarra, que, por fortuna, no impactaron sobre ningún vehículo, aunque sí motivaron el corte parcial de parte de la vía durante una hora.
El geólogo achaca estos derrumbes a la falta de mantenimiento, un problema que considera común a otras vías asturianas y que, subraya, se agrava en temporadas de lluvias continuadas. Ya en diciembre dijo a este periódico que existían más “puntos sensibles” en este tramo de acceso a la capital valdesana, pero ahora ha querido notificarlo por escrito al Consistorio. En el documento, presentado el pasado martes, expone que ha observado evidencias de potenciales desprendimientos al apreciar grietas o fisuras abiertas y también bloques independizados en al menos tres zonas. Una de ellas, la que registró el derrumbe en diciembre. En este punto se procedió a limpiar el material desprendido a la carretera, pero no se actuó en el talud, donde hay más rocas a punto de desprenderse.
Tercer carril
Cabe recordar que en este tramo entre Vistalegre y Luarca lleva años inutilizado el tercer carril para evitar daños a consecuencia de posibles desprendimientos. Sin embargo, a juicio de este experto, es necesario hacer un nuevo diseño de los taludes, sanear las zonas en riesgo de desprendimiento y, también, la instalación de bulones y mallas que eviten los argayos hacia la vía. “Circular por esta zona en días de lluvia continuada es especialmente peligroso”, alerta.
En su informe, López también pide atención para los sistemas de protección colocados en el talud situado entre las playas Primera y Segunda de Luarca, una zona muy transitada, especialmente durante la temporada estival. En este caso, alerta de, al menos, dos problemas. Por un lado, la barrera dinámica colocada en la playa Primera, muy cerca de donde se instalan las populares casetas, está colmatada de material por lo que, indica, ya no cumple con su función. “Siempre deben estar limpias. Lo recomendable en este caso sería cambiarla porque está deformada por el peso del material que lleva años acumulado ahí”, señala. También denuncia que en el talud situado entre las playas Primera y Segunda se ha producido un pequeño desprendimiento que ha dañado la malla de triple torsión.
Consultado sobre este asunto, el alcalde de Valdés, Óscar Pérez, subraya la buena sintonía que existe tanto con la Demarcación de Carreteras como con Costas, a quien ya alertaron del estado de la malla de las playas. “Cuando lo estimen oportuno pasarán. Siempre que avisamos para que actúen, lo hacen, así que no hay por qué preocuparse”, expone.
