El plan de sostenibilidad turística de la comarca Oscos-Eo, dotado con 3,5 millones de euros con cargo a los fondos europeos Next Generation, permitirá dar un paso de gigante en la vieja aspiración del territorio de construir una senda que bordee íntegramente la ría del Eo. Y es que una de las iniciativas estrella de este ambicioso plan es habilitar un nuevo tramo, entre la villa de Castropol y el punto costero a la altura del núcleo castropolense de Iramola. Será la punta de lanza de un proyecto turístico a tres años que potenciará las rutas y los recursos patrimoniales de la comarca más occidental de Asturias.

“Estamos muy contentos porque el plan turístico mejorará nuestra imagen como comarca y esperamos que sea un antes y un después”, resume el presidente de la Mancomunidad y alcalde de Taramundi, César Villabrille, quien subraya como una de “las actuaciones más importantes” por su enorme potencial este cinturón verde de la ría. Ese nuevo recorrido se unirá a otros ya operativos, permitiendo transitar la costa castropolense de Iramola a la playa de Penarronda. Quedaría tan solo pendiente un tramo desde este núcleo al límite con Vegadeo y, como reto de futuro, completar el itinerario en el tramo gallego, donde ya existe otra pequeña senda a las afueras de Ribadeo. “Damos un paso grande en ese reto, dotando a la comarca de un recurso turístico importante. Será una senda ciclable en su mayoría y con zonas de descanso”, dice el alcalde de Castropol, Francisco Javier Vinjoy.

Aunque sobresale esta actuación, son muchas más las propuestas que se detallan en el borrador inicial y que se materializarán en mejoras por los siete concejos de la comarca, con actuaciones conjuntas como una señalización homogénea para todas las sendas del territorio, uno de sus puntos fuertes. Por montante inversor, el segundo proyecto de importancia es la senda de Las Clavelinas, en Vegadeo. Parte de las afueras de la capital veigueña, a la altura del Instituto, y discurrirá paralela a la carretera AS-11, haciendo segura para el peatón la conocida como “vuelta a Piantón”.

Varios ciclistas, el pasado verano, en la senda del ferrocarril de San Tirso de Abres. | T. Cascudo

En San Tirso de Abres, la obra estrella será la mejora integral de la ruta del ferrocarril, su senda más popular y polo de atracción de turistas a lo largo del año. Además de darle una capa de zahorra a todo el trayecto en suelo asturiano, renovar las vallas en mal estado y hacer actuaciones de drenaje en los puentes para evitar la acumulación de agua, está previsto construir un paso subterráneo que evite cruzar la carretera N-640 al inicio del trayecto. En los planes santirseños figura también mejorar la zona fluvial de baños y ampliar la senda que parte de este enclave hasta el refugio de pescadores de Xesteira.

En Taramundi se acondicionarán áreas recreativas y se hará una obra de reforma en la casa del agua de Bres, encaminada a la mejora de la fachada y la eliminación de humedades. También se construirá un aparcamiento en Os Teixóis. El soterramiento de líneas eléctricas en el entorno de La Rectoral y la colocación de unas letras con el nombre del concejo a la entrada de la capital son otras de las iniciativas.

Tres turistas en el monasterio de Villanueva. | T. Cascudo

En los Oscos está previsto tirar de nuevas tecnologías para plantear una visita autónoma a dos joyas arquitectónicas como son el monasterio de Santa María, en Villanueva de Oscos, y el palacio de Mon, en San Martín de Oscos. La falta de personal suele ser un lastre para potenciar las visitas a estos dos inmuebles, así que se buscará una fórmula, ya sea con audioguías o realidad virtual, para que el visitante pueda en cualquier momento del año acercarse a estos recursos tan valiosos. En Villanueva también se va a mejorar el acceso al ecomuseo del pan de Santa Eufemia, mientras que San Martín apostará por mejorar la visita a las minas Carmina y Pena Teixeira con la renovación de la iluminación y los accesos.

Por último, Santa Eulalia de Oscos contempla varias actuaciones como la mejora del molín da Ponte, adquirido hace años y donde será necesario reconstruir el azud para reconducir el agua al enclave, muy cerca de la capital. En el área recreativa de Ferreira están previstas mejoras en el acceso y el entorno, así como construir un nuevo aparcamiento en Pumares que preste servicio a los muchos turistas que realizan la senda de A Seimeira.