Lydia Espina, consejera de Educación del Principado, aseguró este jueves que el cocinero del colegio público de Santa Eulalia de Oscos seguirá en su puesto. Y lo hará solo a partir del 8 de abril, fecha en la que ya no seguirá la persona de refuerzo que se contrató también ante las quejas de los padres. Este trabajador lleva varios años trabajando en el centro y fue sancionado con dos meses de empleo y sueldo por haberse presentado en estado de embriaguez, en febrero de 2020. “Se decidió proporcionar ese apoyo (el de una persona de refuerzo) de manera provisional, pero el puesto está cubierto ya (con el cocinero habitual) y debería de servir”, explicó la Consejera en la Comisión de Educación de la Junta tras la pregunta realizada por la diputada autonómica del PP Gloria García.
Espina dijo comprender la inquietud de los padres del centro, señaló que la responsabilidad laboral de los trabajadores del comedor “depende de Función Pública” y advirtió de que “laboral y administrativamente no se puede apartar a un trabajador que ha cumplido con su expediente”. Gloria García, por su parte, lamentó que este es un “tema que viene desde hace 14 años, no es de ahora” y defendió que las protestas de los padres están justificadas: “Las protestas se han ido sucediendo por alguna ocasión en la que el trabajador no se ha presentado a trabajar y sobre la marcha la dirección del centro ha tenido que encargar comida en algún bar cercano”.
“Se hace un control exhaustivo de lo que ocurre en el comedor”, garantiza la Consejera
Una situación que ha llevado a los padres de los alumnos “al extremo de hacer huelgas y a partir del 12 de enero a hacer una especia de huelga general mientras no se solucionaba el tema”, añadió la popular.
Espina respondió que su consejería ha realizado “un seguimiento exhaustivo” y añadió que se decidió poner a “otra persona de refuerzo por acumulación de tareas”. Si bien no ocultó más adelante que ese refuerzo caducará el 8 de abril.
Por esta razón, Gloria García insistió para que la Consejera expusiese qué va a pasar a partir de ese día: “Está todo bajo control, pero el miedo al 8 de abril está ahí, el miedo a que se vuelvan a repetir las cosas”. La representante del Partido Popular aseguró que no pone “en duda la profesionalidad” de este trabajador, del que dijo que “cuando trabaja bien, trabaja bien”, pero insistió en que “han sucedido cosas” que han llevado a los padres a vivir momentos de “tensión”. Y es que, continuó Gloria García, los padres “no tienen nada en contra de la persona, pero sí en contra del profesional en el momento en que no cumple con sus funciones”.
El PP denuncia que los padres tienen miedo a que se vuelvan a repetir los mismos problemas
También criticó García que la solución de poner a una persona de acompañante es “un parche” y que, además, tiene fecha de caducidad, pues a partir de ese 8 de abril se le acaba el contrato y dejará de asistir. De ahí el temor a que después de esa fecha “se puedan repetir este tipo de situaciones”.
La razón por la que, dijo la diputada autonómica del PP, traen ahora a la Comisión de Educación este asunto es precisamente para que se encuentre una solución lo antes posible y cuando el trabajador de refuerzo ya no esté no se repitan las cosas: “Por eso traemos este asunto en febrero, para que desde ahora hasta abril se tome alguna medida que sea definitiva”.
Lydia Espina garantizó en su respuesta que se están tomando medidas para que los alumnos del colegio reciban el servicio “en condiciones de seguridad” y que todo se lleva a cabo “preservando los derechos de todas las partes”.
También concretó la razón por la que se decidió contratar a una persona de refuerzo en el comedor escolar: “Para ayudarlo en la reincorporación al puesto, también en un pico pandémico”, En definitiva, insistió Espina, “para facilitar la reincorporación” de esta persona a su trabajo.
Fue asimismo contundente la consejera de Educación en que se hará un seguimiento “exhaustivo” de este trabajador para evitar que se repitan las cosas del pasado. “Se está haciendo una supervisión, un seguimiento semanal, un control exhaustivo de todo lo que ocurre en el comedor”. Falta por saber cómo se toman las familias de los alumnos de este colegio que el trabajador que se ha contratado como apoyo al cocinero no seguirá más allá del 8 de abril. La posibilidad de que siguiera al menos hasta final de curso fue una de las razones por las que decidieron no seguir con las protestas que habían convocado.
