Las obras de restauración de la antigua mina a cielo de Tormaleo, en Ibias, así como las labores de acondicionamiento de los terrenos para destinarlos a nuevos usos, están desde este miércoles oficialmente en marcha, con la previsión de que los trabajos en la de Cerredo (Degaña) puedan arrancar a lo largo del mes que viene. El Instituto de Transición Justa y la Consejería de Industria dieron ayer por inaugurada la actuación en la abandonada explotación ibiense, muy esperada en la comarca tras su cierre. Se invertirán 48 millones de euros en los próximos cuatro años, siendo el mayor proyecto para la recuperación de espacios mineros de España.
La directora general de Energía, Minería y Reactivación, Belarmina Díaz, avanzó que el procedimiento administrativo para la recuperación del yacimiento de Cerredo, en Degaña, estará formalizado en mayo, con un plazo de ejecución de tres años, dando paso también a la tramitación de la actuación prevista en la mina de Buseiro, en Tineo. “En los próximos meses vamos a tener los encargos lanzados e iniciadas las obras”, detalló.
Por su parte, el consejero de Industria, Enrique Fernández, apuntó que la obra de Tormaleo supone “un cambio radical en este espacio yermo y degradado, para generar un nuevo ámbito de actividades productivas”. Una reactivación económica destinada a iniciativas agrícolas y ganaderas, silvícolas-forestales o de uso turístico y cultural.
La obra de restauración corre a cargo de Tragsa y prevé la creación de 74 empleos. “Uno de los compromisos era emplear excedentes de la mina, pero en Ibias no quedaron. Lo que vamos a hacer es un listado de gente en paro”, indicó la alcaldesa, Gemma Álvarez.