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Boal aplaude el éxito "rotundo" de visitas a la Feria de la Miel

"Se superaron todas las expectativas", dice el presidente del consejo regulador de la IGP Miel de Asturias, Julio Fernández

Una de las participantes en la Feria de la Miel de Boal, el pasado fin de semana. | Ana Paz Paredes

La 35.ª Feria de la Miel de Boal fue un éxito "rotundo" de visitas y ventas. Así lo cuenta el Alcalde de Boal, el socialista José Antonio Barrientos, para quien "está claro que este encuentro se consolida y atrae a mucha gente de la comarca y de Galicia".

El Ayuntamiento de Boal no tiene de momento el número de visitas contabilizado, si bien estima que durante los dos días de certamen, los pasados sábado y domingo, pasaron miles de personas por el polideportivo boalés donde se instalan los expositores.

Entre los productores asistentes también se palpa el optimismo. El presidente del Consejo Regulador de la nueva Indicación Geográfica Protegida (IGP) Miel de Asturias (presentada en el certamen), Julio Fernández, asegura que la feria boalesa "fue un éxito de asistencia". Además, "se superaron todas las expectativas", ya que la inauguración de la cita coincidió, sin apenas notarse con respecto a otros años, con la entrega del premio "Pueblo ejemplar" a Cadavedo, en Valdés.

El sector apícola no está pasando por un buen momento se si tiene en cuenta el encarecimiento de los costes de producción, si bien el cliente de la miel de Asturias "es fiel" y eso asegura el comercio. Precisamente por esta razón, la feria boalesa "suele tener mucho tirón" y las ventas durante los dos días de certamen "han sido buenas en general". Además, este año hubo mucho interés por la marca IGP "Miel de Asturias", estrenada en Boal como adelanto y a través de la que se esperan certificar dos toneladas del producto en el Principado.

Durante el certamen, dos productores de los 24 apicultores pudieron vender el producto con el nuevo sello que garantiza que la miel envasada es asturiana y sigue unos estrictos controles.

La presidenta de la Asociación de Abeyeiros (apicultores) del Occidente, Andrea González, detalla que la feria atrajo a mucha gente, aunque en su caso las ventas no fueron las esperadas. "Se nota que el cliente tiene menos poder adquisitivo y que compra con más sentido", apunta, y destaca que la marca IGP generó mucho interés entre el público. De hecho, los apicultores esperan que en unos meses se conozca y demande más y que todas las empresas se acojan al Consejo Regulador para hacer de la miel de Asturias un producto único.

Los apicultores siguen afrontando varios problemas que afectan a la producción. Por un lado, hay plagas de varroa y continúa muy presente la avispa asiática, insecto que se alimenta de principalmente abejas. Por otro lado, las atípicas temperaturas para la estación del año, que complican las recogidas de la miel en las fechas tradicionales.

El producto que se recoge en las colmenas asturianas se vende principalmente en la comunidad asturiana, según la dirección del Consejo Regulador, y con la llegada del sello IGP se espera fidelizar clientes y aumentar las ventas.

La nueva marca, que se suma al resto de las indicaciones geográficas protegidas de Asturias, se presentará oficialmente el 11 de noviembre en Oviedo, si no hay modificaciones en la agenda de la dirección del Consejo Regulador.

La Feria de la Miel de Boal es un gran expositor para los apicultores, especialmente para los productores del Occidente. El certamen es el más antiguo de Asturias del sector y cada año, además de reunir a los principales productores de la zona, ofrece variedad de productos de la tierra o artesanales de Asturias y Galicia y actividades que dan a conocer el oficio del apicultor.

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