Conmoción en el Occidente: "Es una desgracia terrible, son muy buena gente", lamentan los vecinos de la anciana fallecida tras ser atropellada por un tractor

"Es una pena, una auténtica desgracia para una familia muy buena". Las palabras de Leonardo Fernández, alcalde pedáneo, resumen el sentir de los vecinos de la localidad valdesana de Muñás de Arriba ante el trágico accidente mortal que a primera hora de esta mañana se cobró la vida de María Esther Encarnación Suárez, generando honda consternación en el concejo y en toda la comarca. La mujer, de 89 años de edad, murió atropellada por el tractor con remolque que conducía el marido de su nieta, Manuel Cano, nacido en 1967. El suceso tuvo lugar alrededor de las ocho de la mañana cuando el vehículo circulaba marcha atrás por un estrecho vial dentro de la ganadería familiar, una de las más importantes de la zona. El conductor no se percató de la presencia de la mujer y la arrolló. La médica de Trevías que se desplazó al lugar confirmó el fallecimiento. El levantamiento del cadáver tuvo lugar pasadas las once de la mañana, una vez que la Guardia Civil dio por terminada la investigación.

La llamada que activaba a los servicios de emergencia y a Guardia Civil y Policía local de Valdés, que se desplazaron al lugar, se recibió poco después de las ocho de la mañana. Nada pudo hacerse por salvar su vida.

En la localidad hay una gran conmoción por lo sucedido, aunque se trata de un núcleo con escasas viviendas y la noticia ha trascendido poco a poco a lo largo de la mañana.

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