"Llevaré con orgullo este nombramiento, el más importante que se me ha otorgado", defiende el exalcalde Roberto Pérez como hijo predilecto de Belmonte

La regidora en funciones considera de "justicia" el reconocimiento a su predecesor, que gobernó el concejo entre 1979 y 2011

T. Cascudo

“Llevaré con orgullo este nombramiento, que es el más importante que se me ha otorgado”, dijo el belmontín Roberto Pérez, de 81 años, en el acto de su nombramiento como hijo predilecto de Belmonte de Miranda. Quien fue Alcalde del concejo occidental durante treinta y dos años (gobernó entre 1979 y 2011) mostró su agradecimiento por el emotivo reconocimiento y defendió que, durante sus años de gobierno, su mayor empeño fue “ser Alcalde de todos y para todos”, con el único objetivo de "mejorar la calidad de vida de los habitantes del concejo".

Pérez leyó su discurso en compañía de la Alcaldesa en funciones, la socialista Rosa Rodríguez y de María Antonia Fernández Felgueroso, que preside el Consejo de Comunidades Asturianas, organismo donde el homenajeado fue vicepresidente y ahora, ejerce de vocal. Felgueroso reconoció expresamente la gran labor que el exalcalde socialista realizó con los centros asturianos y en materia de emigración, como demuestran los muchos reconocimientos que ha recibido en su larga trayectoria política. “Fue un gran impulsor de las políticas de emigración del Principado y consiguió que muchos emigrantes pudieran venir a su tierra natal gracias a programas como Operación Añoranza, que él impulsó”, dijo Felgueroso.

Por su parte, la Alcaldesa en funciones reconoció que el nombramiento de Roberto Pérez como hijo predilecto respondió a un “clamor” vecinal que demuestra que “el esfuerzo, el trabajo, el compromiso y la dedicación” se premian.

“Es un homenaje de justicia, tanto para él como para las personas que lo acompañaron en las diferentes corporaciones. Ser Alcalde supone una dedicación extra porque estás veinticuatro horas pendiente de tus vecinos y de buscar lo mejor para tu concejo”, expresó la regidora, que el próximo 17 de junio cederá el bastón de mando al alcalde electo, el socialista Gilberto Alonso, también presente en el acto.

El homenajeado tuvo palabras de recuerdo para algunos de los ediles que le acompañaron en la aventura de “cambiar el concejo”, caso de José Manuel Quintana, que “me aportó un apoyo incondicional”. “Todos los concejales colaboraron y, afortunadamente, nunca hubo grandes discrepancias y la convivencia fue excelente”, señaló el exalcalde, que enumeró algunas de las muchas obras y servicios conseguidos para el concejo como la construcción del centro médico o la residencia de mayores, la mejora de las traídas de aguas, la promoción de viviendas protegidas y, también, la creación del concurso del caballo o la puesta en marcha de la Casa del Lobo. “Fuimos un equipo compacto”, señaló.

En este sentido, recordó también a otros compañeros de partido como Vicente Álvarez Areces o Antonio Trevín. “Sin su apoyo no hubiese conseguido todos los efectivos logrados”, subrayó al tiempo que hizo alusión a sus muchos viajes al extranjero durante su época de vicepresidente del Consejo de Comunidades Asturianas o a su apuesta por las mancomunidades, que le llevó a ser el primer presidente del Camín Real de la Mesa.  

Gracias a los vecinos por su comprensión, aunque no siempre conseguí satisfacer los deseos de todos ellos, en mi pensamiento deseaba ser el alcalde de todos y para todos”, terminó Pérez, que agradeció especialmente la comprensión de su mujer y de su familia por todo el tiempo robado en sus años de servicio público.

El acto terminó con el descubrimiento de una placa  alusiva al nombramiento en la fachada de la casa del homenajeado, justo en frente de la iglesia. El broche final lo puso el coro local, que sorprendió al homenajeado con una pequeña actuación.