"Qué tristeza", el lamento de los vecinos de Rozadas, el pueblo que llora la muerte del "querido" Francisco del Camín, fallecido en un incendio

Fue una patrulla de la Guardia Civil la que alertó del incendio que acabó con la vida de Francisco Fernández Fernández, más conocido como "Francisco del Camín", en honor al nombre de su casa de Rozadas, en Boal. Cuentan los vecinos de este pueblo que los agentes vieron las llamas desde El Gumio (una aldea de la misma parroquia más elevada) en torno a la una y media de la madrugada: "Mala señal". "Yo estaba dormida y la verdad es que no es oyó nada; me llamó mi hijo (con el que vive) porque le llamaron a él por teléfono", dice Julia Pérez, desde cuya casa puede observar la vivienda del fallecido.

Lo que vio cuando se desperezó fue desolador: las llamas y también la impotencia de los servicios de rescate, que no pudieron hacer nada por salvar a Francisco, el único habitante de la conocida "Casa Camín". Los efectivos de Bomberos desplazados se encontraron con la vivienda muy afectada por las llamas y solo pudieron controlar el imponente fuego para, en primer lugar, acceder al lugar donde se encontraba el cuerpo de la víctima.

La principal hipótesis, según el Alcalde, José Antonio Barrientos, es un cortocircuito, si bien es pronto para determinar el origen ni las causas. Como es preceptivo en estos casos, la Guardia Civil ha abierto una investigación. Lo cierto es que la casa, con mucha madera (según los testigos), ardió como la pólvora. A mitad mañana solo quedaban las vigas y parte de la estructura de piedra, la misma que los Bomberos (se desplazaron equipos de los parques de Castropol y Luarca) esperaban tirar con la presión del agua para evitar males mayores.

La zona no se acordonó hasta llegada la tarde. El trasiego de los servicios de emergencias del Principado y la Guardia Civil fueron en todo momento constante. No tanto el de vecinos que prefirieron guardar su pena en casa una vez conocida la desgracia. Julia Pérez mostraba su pesar desde la venta de su comedor. "Qué tristeza". Francisco era una persona "vivaz y alegre" para sus convecinos. Era muy conocido por ser cantante de tonada. Siempre dispuesto a ayudar o tomar un café. Siempre con una sonrisa para aquella persona que la necesitara. "Animoso, vital y muy amigo de las plantas, por cierto", contó su vecina.

"Francisco del Camín" tenía una vida tranquila. "Salía a pasear, tomaba el café con vecinos" y tenía ayuda. Por la mañana, de una trabajadora de Ayuda a Domicilio. Por la noche, se ocupaba de los una vecina. El mayor problema que tenía "Francisco de Camín", aportan los vecinos, era el de movilidad tras ser operado de cadera. Podía pasear con el apoyo de bastones, pero necesitaba ayuda para levantarse y acostarse de la cama.

Conocido en el mundo de la cultura y costumbres (y especial de la canción), asturianas, pronto las redes sociales se llenaron de pesar. El veigueño Abel Pérez, productor cultural, recordó su forma de ser y su aportación: "Fai un mes más ou menos puidemos disfrutar nunha polavila en Veiga d'Ouria da enorme sabiduría, elegancia y buen humor" de Paco del Camín. También el profesor franquino Iván de Cazarón tildó de "irrepetible" la figura del boalés: "Sigue cantando como as calandrias alló unde pares, amigo", le deseó en las redes sociales.

La familia y los vecinos recibieron con la honda y esperada desesperación lo ocurrido. Francisco de Camín, estaba viudo y tenía dos hijas. El funeral se celebrará este miércoles a las cuatro de la tarde en la iglesia de la parroquia de San Blas de Rozadas.

El Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA) registró la primera llamada de alerta a las 1.32 horas de la madrugada. El incendio se dio por controlado a las 3.39 horas. Al lugar se desplazaron bomberos con base en los parques de Castropol y Valdés. Realizaron los trabajos con vehículo nodriza, una autobomba forestal y la autobomba urbana, un vehículo ligero y la autoescalera.

Las labores de extinción continuaron a lo largo del día.