La Fundación Princesa de Asturias reúne en Tineo a sus Pueblos Ejemplares: "Nuestro compromiso con el medio rural es profundo"

La directora de la Fundación Princesa de Asturias, Teresa Sanjurjo, abrió este sábado en Tineo el décimo cuarto Encuentro de Pueblos Ejemplares manifestando el “compromiso profundo” de la entidad con el medio rural asturiano. Un compromiso que, añadió, va a continuar “con más extensión, ampliando los horizontes”.

En la cita se puso de manifiesto la “emoción” que sienten los pueblos homenajeados con la distinción anual, pero también el valor de los muchos y pequeños emprendedores que salpican y pueblan el rural. Ellos alzaron la voz para reivindicar la vida en los pueblos, pero también, para pedir más recursos y menos burocracia. Con todo, lanzaron un mensaje optimista y animaron a perder el miedo a emprender desde los pueblos.

“Si sientes que tienes que poner en marcha una iniciativa, hay que seguir al corazón y luchar por ello. Si fracasas te quedarás con eso de haberlo intentado y de haber luchado por el territorio”, expresó Lucía González, la responsable de Allande Stars. A su lado, la ganadera Lucía Velasco también quiere ver esperanza en el futuro y reivindicó el valor de la ganadería “que es la que da vida a los pueblos”, pero pidió flexibilizar la legislación. “La burocracia es cada vez más difícil de llevar y aburre; tienen que dejarnos trabajar”, añadió.

Junto a ambas, Leandro Meléndez, responsable de Fungi Natur, un proyecto de cultivo de setas en los bosques de Cabranes, señaló que el problema reside en “que no hay leyes específicas para los pueblos y el mundo rural tiene unas particularidades muy específicas que, si queremos mantener, hay que adaptar la legislación”. Este biólogo pidió “facilitar los proyectos que se generan en los pueblos sea como sea”.

Los tres hablaron de sus sueños, de la razón que les llevó a apostar por Asturias y de las ventajas del rural en un coloquio moderado por el gerente de la Asociación para el Desarrollo Rural e Integral del Oriente de Asturias, Germán Romano.

Antes del coloquio, el maestro cangués Tito Casado habló de la escuela rural en una ponencia salpicada de anécdotas y muy reivindicativa porque, dijo, “la escuela es parte del alma de los pueblos”. Dejó claro que en los pequeños centros educativos (el mínimo es de cuatro alumnos) perder un niño puede ser “una tragedia” que lleva al cierre. En este sentido, expresó su convencimiento de que el futuro “pasa por ser capaces de mejorar la vida de la gente que vive en los pueblos, que se vea como una ventaja y no como un inconveniente”.

Casado, que ejerció durante veintiocho cursos como maestro rural, defendió el amor que siente por su profesión, pero también pidió mejoras. En este sentido, lamentó que la “Universidad no enseñe a los futuros maestros sobre la escuela rural” o que los libros de texto solo estén pensados para los niños de las ciudades, en ellos, “los pueblos no existen”.

Tineo también tuvo un papel protagonista en el encuentro, por ser uno de los cinco concejos de Asturias en los que ha habido más de un Pueblo Ejemplar. Los afortunados son Tuña y Navelgas, que fueron distinguidos en 2000 y 2003, respectivamente. El presidente de la asociación de vecinos El Xardón, de Tuña, Alberto Fernández, y el artista Manolo Linares, de Navelgas, mostraron sus impresiones del galardón en un coloquio moderado por el secretario del jurado del Premio al Pueblo Ejemplar, Fernando Delgado.

Los dos tinetenses describieron la “emoción” y la “expectación” con la que sus pueblos vivieron aquella jornada. Linares defendió que “la gran labor del premio Pueblo Ejemplar es poner en el mapa” a las localidades que lo reciben. A renglón seguido criticó la difícil situación que viven los pueblos: “El mundo rural se viene abajo y no se está haciendo nada”.

Al acto acudieron representantes de los diferentes pueblos homenajeados en las treinta y cinco ediciones del galardón, así como diferentes alcaldes y cronistas oficiales de la región, entre otras personalidades. Ejerció de anfitriona la alcaldesa de Tineo, Montserrat Fernández, que agradeció que la Fundación Princesa de Asturias recalase en el concejo y aprovechó la ocasión para presumir de los dos grandes eventos internacionales que el concejo acogerá próximamente: La feria Asturforesta y el Mundial de Bateo de oro. Precisamente al término de las ponencias en el palacio de Merás hubo una exhibición de bateo a cargo de la asociación de bateadores “Barciaecus”.

La presidenta de la Fundación Princesa de Asturias, Ana I. Fernández, clausuró el acto dejando claro que los pueblos homenajeados “representan lo mejor de nuestras raíces y nuestro futuro”. Defendió que el galardón busca “potenciar, permitir y ayudar” al compromiso vecinal y al sentido de comunidad que existe en los pueblos. “En un mundo marcado por la prisa y la incertidumbre vuestros pueblos enseñan que es posible vivir de otra manera”, dijo, al tiempo que calificó de “relevante” e “inspirador” el hecho de ver “cómo habéis construido una identidad sólida donde la participación comunitaria sigue siendo un valor vivo”. Zanjó su intervención animando a los pueblos “a construir comunidades cohesionadas, orgullosas y abiertas al mundo”.