'Masterchef Junior' despidió en su segunda entrega, la del 25 de diciembre, a tres nuevos concursantes, algo que ya ocurrió en el primer programa de la sexta edición. Fueron Unai, Carlota y Ferrán los que, entre lágrimas y llenos de tristeza, dijeron adiós a su sueño.

Los concursantes se enfrentaron a una prueba en la que tenían que imitar los postres que Marta Verona, ganadora de 'Masterchef 6', les enseñó con alternativa al azúcar refinada. Ninguno de los tres consiguió la puntuación necesaria para seguir, pero, eso sí, prometieron "darlo todo" en la repesca.

Si algo han aprendido hasta el momento es a esforzarse y luchar por sus sueños, algo que Ferrán tiene muy claro. El joven concursante recalcó que "portándose bien se pueden conseguir cosas muy grandes".

Unai, el más de emocionado de todos, no pudo dejar de llorar y confesó que esta experiencia ha sido única para él: "Nunca voy a olvidar esta experiencia y a mis amigos porque has sido como estar una vida entera con ellos".

Pero el momento más emocionante de la noche, sin duda, fue el que protagonizó Carlota en su despedida. La pequeña le relató a Eva González que en su expulsión encontraba una parte positiva: volver a ver a su padre. Y es que por cuestiones laborales lleva mucho tiempo sin verle: "Mi padre estaba trabajando en Sudáfrica y ha venido. Me va a decir que soy una campeona".