El director indio M.Night Shyamalan ha dicho la mañana de este sábado en el 51 Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya que se celebra en Sitges (Barcelona): "Aunque me den todo el presupuesto del mundo, no lo necesito. No es mi estilo".

El director de 'El sexto sentido' ha presentado en el festival un fragmento de su nueva cinta con estreno en enero, 'Glass', --continuación de 'El protegido' y 'Múltiple', y que tiene como protagonistas a Bruce Willis, Samuel J.Jackson y James Mc Avoy--, y en rueda de prensa ha dicho que prefiere centrase en escenas de personajes porque allí reside la acción que en los efectos especiales.

Ha asegurado que prefiere hipotecar su casa para la realización de sus películas y así poder ir al extremo más raro y explorar nuevas posibilidades con un presupuesto reducido: "Eso me otorga libertad para crear algo raro".

Ha avisado que la película 'Glass' conforme avanza se vuelve más rara, y que le gusta poder cambiar de género y centrarse en los personajes donde, más que efectos especiales, se dan conversaciones interrumpidas por ruidos en la habitación de al lado.

Ha avanzado que la película es muy contenida: "Mi instinto me dice que hay que contenerse e implicar cosas", ha agregado Shyamalan, que considera que el cine congrega todos los lenguajes para contenerse e implicar: desde el baile, hasta el vestuario, pasando por la fotografía.

Sobre Bruce Willis y Samuel L.Jackson, ha destacado del primero su faceta como padre, mientras que del segundo ha dicho que lleva 17 años pidiéndole hacer la secuela de 'El protegido'.

De hecho, cuando le dio el papel le dijo: "Voy a llamar 'Glass' a tu personaje con la idea de que todos tenemos algo de extraordinario y los marginados quizás tienen un lugar en el mundo".

Ha asegurado que en el año 2000 parecía que el público no iba a ver una película sobre cómic y que era algo para "un grupúsculo de personas muy freaks", pero ha celebrado que el mercado se ha oscurecido y en 15 años acepta cintas más raras e inadecuadas.

Ha asegurado que siempre intenta sentirse como un primerizo, y ha dicho que no le gusta saber que todo vaya a salir bien, sino mostrar algo con tonos diferentes, lugares desconocidos y que se desentrañe un nuevo lenguaje: "El drama combinado con terror".

"Me gusta romper los géneros o combinarlos, es lo que realmente me entusiasma. Asumo riesgos y el riesgo de cometer fallos, nunca protegerse", ha dicho sobre esta actitud de aprender cosas y de situarse como aprendiz.

Sobre sus miedos, ha dicho que si bien encontrar sangre en las paredes le parecería algo más bien fantasioso, cuando era pequeño y llegó a casa con su padre encontraron la puerta abierta: "Tenía miedo de encontrar un loco en mi cama esperándonos".

"Los accidentes de tren y de coche donde puedes perder a alguien son los que de verdad me asustan, donde el mundo se vuelve del revés", ha añadido el director, mientras que considera que las historias de cómics, aliens y fantasmas son metáforas de momentos catárticos y espirituales.

Sobre su trayectoria cinematográfica, ha dicho que tras unas cintas familiares en su faceta de padre de tres hijas, se volvió más travieso: "A algunas de mis cintas familiares si le hubieran quitado mi nombre habrían funcionado mejor. Luego me crecieron las niñas y quise asustarlas. Hubo una progresión muy natural".

Preguntado sobre sus finales sorpresa, ha dicho que le divierte pensar en cómo está contando la historia tanto en cómo la cuenta: "La suerte para mí es como escribo todas mis películas y son originales", ha añadido sobre lo que considera que en realidad es la evolución natural de sus personajes: tener epifanías.

Sobre su director de vestuario canario, Paco Delgado, ha dicho que es el más dulce que pueda haber, y que le conoció por las películas de Pedro Almodóvar: "Tiene un gran sentido de la forma, con vestidos atrevidos pero uniformes, con formas elegantes y sinuosas".