Se acaba el verano y muchas personas comienzan a cuidar con un mayor detalle su alimentación para mantenerse bien por fuera, pero sobre todo saludable por dentro. Así, muchos de los llamados “superalimentos” se han colado ya en nuestros menús diarios debido a sus beneficios y a los nutrientes que aportan. Avena, kale, aceite de oliva, lino, aguacate… forman ya parte de nuestro día a día y se han convertido en los protagonistas de muchos de nuestros platos.

Sin embargo, existen algunos alimentos prácticamente desconocidos para muchos, que son ideales para la llegada del buen tiempo y que, poco a poco, sería bueno que incorporáramos a nuestra dieta por sus múltiples beneficios en nuestra salud. Entre ellos podemos destacar los siguientes cinco:

1. Proteína de guisante

Los guisantes siempre han estado denostados en las dietas porque se consideraba que, al ser legumbres, podían engordar. Sin embargo, esto no es así y son una fuente perfecta de proteína vegetal. Además, tienen un alto contenido de hierro y fósforo. Cuentan con un bajo aporte calórico y una cantidad casi inexistente de grasas, lo que los convierten en un alimento más que aconsejable para bajar de peso.

2. Gofio de maíz

El gofio es un alimento típico canario rico en fibra dietética. Es quizás uno de los superalimentos más desconocidos. Con el nombre de Gofio, se denomina a una variedad de harina de maíz o harina de millo tostada de forma artesanal. Retrasa la absorción de hidratos de carbono simples ayudando a regular el azúcar en sangre y manteniendo la sensación de saciedad.

El gofio es un alimento típico canario rico en fibra dietética ShutterStock

3. Amaranto

El amaranto es un pseudocereal, al igual que la quinoa. Con ella comparte varias propiedades. Por ejemplo, tiene mucha proteína, minerales y vitaminas naturales. Además, contiene mucho ácido fólico (algo esencial en el embarazo), calcio y hierro.

4. Laver

El laver es un superalimento que, a lo mejor, por el nombre no suena mucho pero que seguro que has tomado alguna vez si eres amante de la comida japonesa. Se trata del alga comestible que suele enrollar los makis. Es rica en vitamina C y yodo.

5. Harina de soja

La harina de soja es un tipo de harina obtenida a partir de granos enteros molidos de soja. Se caracteriza por un aporte nutricional equilibrado de proteínas de origen vegetal, fibras, grasas y minerales. Es fuente de vitaminas y rica en minerales. Además de estas propiedades, la harina de soja contiene hierro, fibra y potasio.